Cómo detectar un alquiler de vacaciones fraudulento: consejos para evitar el engaño

Cómo detectar un alquiler de vacaciones fraudulento: consejos para evitar el engaño

En épocas de vacaciones, cuando la búsqueda de alojamientos atractivos y económicos se vuelve una prioridad, es fundamental estar alerta ante la posibilidad de caer en una estafa. Los alquileres de vacaciones fraudulentos son cada vez más comunes y pueden dejar a los turistas en una situación comprometida. Sin embargo, conociendo los indicadores clave de una oferta sospechosa y tomando medidas de precaución, es posible evitar el engaño y disfrutar de unas vacaciones tranquilas y seguras. A continuación, te presentamos algunos consejos valiosos para detectar un alquiler de vacaciones fraudulento y proteger tus ganancias.

Evita el engaño: consejos para detectar un alquiler vacacional fraudulento

Cuando se aproxima un periodo estival, como las vacaciones de verano o las de Navidad, así como en otros días festivos, los ciberdelincuentes tratan de aprovecharse de la inocencia de las personas para hacerse con sus datos personales y/o bancarios, o directamente robar su dinero, recurriendo para ello al alquiler vacacional fraudulento.

A lo largo de los últimos años ha crecido el número de víctimas de alquileres vacacionales falsos. Habitualmente, los estafadores ofrecen casas de ensueño, ubicadas en lugares privilegiados, a unos precios difíciles de rechazar.

Claves para identificar una estafa en el alquiler vacacional

Para evitar convertirse en víctima de una estafa relacionada con los alquileres vacacionales, conviene tener en cuenta una serie de aspectos importantes, siendo el primer indicativo de que puede ser un fraude el hecho de que se ofrezca un alojamiento perfecto a un precio demasiado bajo.

Los ciberdelincuentes, en su intención de estafar al mayor número de personas posible, acostumbran a diseñar ofertas muy atractivas, cuidando las fotografías para que luzcan de la mejor manera posible, ofreciendo alojarse a precios inusualmente reducidos, en las mejores condiciones y en zonas de alta demanda. Por lo tanto, si te encuentras con un gran “chollo” en comparación con el resto de viviendas de alquiler, es muy probable que sea una estafa.

Además, es recomendable hacer una búsqueda de imágenes en Google, ya que en muchas ocasiones los delincuentes roban imágenes de otros anuncios, e incluso muchas veces copian el texto de anuncios reales, modificando (o no), algunos detalles.

Más allá del propio anuncio, una señal de alerta llega cuando, una vez que se ha contactado con el supuesto propietario del inmueble, este recurre a todo tipo de artimañas para que hagas rápido el pago, tratando de generar urgencia (habitualmente hablando de otros muchos interesados en alquilar la vivienda).

La mejor forma de evitar la estafa es nunca compartir datos sensibles con desconocidos, y recurrir a plataformas que ofrezcan mayor seguridad para alquilar una vivienda vacacional.

Otro signo que puede llevar a la sospecha con respecto a un alquiler vacacional fraudulento surge cuando el supuesto propietario quiere realizar todo el proceso a través de internet y no permite la visita del inmueble. Cuando se solicita y el propietario asegura que está de viaje o que reside en el extranjero y que no es posible, es un claro indicativo de que podría tratarse de una estafa.

Para evitar ser víctima de uno de estos fraudes, conviene informarse bien acerca del alquiler vacacional que te pueda interesar, comprobando que todos los datos que se facilitan son ciertos y tratando de realizar el trámite a través de una plataforma de confianza. Aunque estas no están exentas de viviendas falsas, sí que pueden ser más fiables, sobre todo cuando se trata de usuarios reputados que tienen un número considerable de valoraciones por parte de otros huéspedes.