Descubre el secreto para detectar con facilidad si un huevo está crudo o cocido sin necesidad de abrirlo

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Descubre el secreto para detectar con facilidad si un huevo está crudo o cocido sin necesidad de abrirlo

¿Alguna vez te has encontrado en la situación de dudar si un huevo está crudo o cocido sin saber cómo averiguarlo sin abrirlo? Pues bien, hemos descubierto un truco sorprendentemente sencillo que te permitirá determinar el estado de un huevo con facilidad y sin necesidad de romperlo. Esta técnica es tan efectiva que te permitirá distinguir entre un huevo crudo y uno cocido con solo unos segundos de inspección. ¡A continuación, te revelamos el secreto para detectar el estado de un huevo sin necesidad de abrirlo!

Descubre el secreto para detectar si un huevo está crudo o cocido sin abrirlo

Los huevos pueden tener muchos efectos positivos para nuestra salud, gracias a su alto contenido en nutrientes necesarios. Sin embargo, con los huevos y su manipulación debemos tener cuidado, para evitar contaminaciones innecesarias. Sucede que con las prisas, en muchos hogares preferimos tener unos cuantos huevos cocidos para poder 'echar mano' de ellos cuando sea necesario.

Pero, ¿qué pasa cuando se nos mezclan en la nevera con los que están crudos? ¿Cómo aprendemos a diferenciarlos sin romper la cáscara? Es importante que aprendamos a distinguir si un huevo que hemos traído del supermercado está en óptimas condiciones, puesto que son delicados en cuanto a frescura y conservación.

Precauciones de manipulación y conservación de los huevos

Precauciones de manipulación y conservación de los huevos

Todos los beneficios saludables que tiene el huevo, constatados por los principales organismos alimentarios, se irán al traste en el momento en el que lo manipulemos de forma inadecuada. El tratamiento térmico tiene especial importancia, tanto desde el punto de vista nutricional como sanitario.

Los huevos crudos deben ser una excepción en nuestra dieta. Es recomendable someterlos a altas temperaturas por seguridad. El calor también se recomienda para evitar intoxicaciones como la que produce la bacteria salmonella. Para garantizar que se elimina absolutamente, basta con someter al huevo a una temperatura de 70 °C, durante un par de minutos o más.

¿Cómo puedo saber si un huevo está malo antes de cocinarlo?

Existe una manera sencilla (relacionada con el agua) de saber si un huevo está en malas condiciones sin romper su cáscara. La famosa e infalible prueba del bol de agua nos permitirá saberlo sin romper la cáscara.

¿Y en qué consiste? Es muy sencillo: cogemos el huevo crudo, lo sumergimos en un bol de agua con un 10 por ciento de sal disuelta. Si al incorporar el huevo se va directamente al fondo del recipiente, tranquilos, ese huevo está fresco. Si, por el contrario, flota, es mejor desecharlo (a no ser que esté cocido, que los huevos cocidos flotan).

Otro consejo hace referencia al aspecto de la cáscara. Los huevos viejos cambian su densidad debido al aumento de espacio de la cámara de aire que hay entre la membrana interna y la externa. La cáscara del huevo nuevo es áspera y opaca. Cuando es viejo se presenta más lisa y brillante. Si el huevo está agrietado, deséchalo para evitar riesgos sanitarios.

El truco definitivo para distinguir un huevo crudo de uno cocido

Ahora sí. Para poder diferenciar en la nevera cuáles son los huevos que ya hemos cocido previamente para conservarlos mejor (o porque vamos a cocinar algo posteriormente con ellos) y cuáles están aún crudos, existe un truco muy sencillo que apenas nos llevará unos segundos.

A menudo los huevos que ya hemos cocido y los frescos se nos mezclan en la nevera, y por su apariencia exterior es imposible distinguirlos. La idea es no tener que cascar el huevo porque, si es el cocido no hay problema, pero si se trata del que aún estaba crudo vamos a tener que utilizarlo inmediatamente, cuando a lo mejor no estaba en nuestros planes.

Sobre una encimera despejada, coge el huevo del que tienes dudas. Como si se tratase de una peonza, hazlo girar sobre sí mismo con tus dedos: si apenas da unas pocas vueltas y se detiene enseguida, tendrás ante ti un huevo crudo. Si, por el contrario, gira muy rápido, mucho, y termina por ponerse prácticamente de pie, ese huevo está cocido. Un truco sencillo e infalible.

Recuerda: los huevos deben conservarse siempre en el frigorífico, donde debemos colocarlos con la punta más fina hacia abajo. Cuando vayamos a cocinar, sólo deberemos sacar los huevos que vamos a consumir, y no todo el cartón para evitar cambios de temperatura innecesarios.

Marina Ramírez

Soy Marina, una autora apasionada por la actualidad nacional española. En Diario Online, un periódico independiente, comparto mis análisis y opiniones sobre los eventos más relevantes de nuestro país. Con mi pluma perspicaz y mi compromiso con la verdad, busco ofrecer a los lectores una visión objetiva y completa de la realidad que nos rodea. ¡Acompáñame en este apasionante viaje a través de las noticias más importantes de España!

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