- El 1% más acaudalado del planeta concentra más riqueza que el 95% de la población global
- La sombra de la oligarquía: el 1% más rico del planeta concentra más riqueza que el 95% de la población global
- La influencia de los milmillonarios
- La hiperconcentración de poder y riqueza
- La oligarquía mundial
- Control de los activos financieros globales
- La desigualdad extrema y el multilateralismo
El 1% más acaudalado del planeta concentra más riqueza que el 95% de la población global
En un informe revelador, se destaca que la desigualdad económica ha alcanzado niveles alarmantes a nivel global. Según los datos, el 1% más acaudalado del planeta acumula más riqueza que el 95% de la población global. Esta cifra es impactante y pone de manifiesto la enorme brecha entre los que más tienen y los que menos poseen. Esta concentración de la riqueza en manos de una minoría tiene implicaciones graves en la estabilidad social y económica de las naciones. En este sentido, es fundamental analizar las causas y consecuencias de esta situación, así como buscar soluciones para reducir la desigualdad y promover una distribución más justa de la riqueza.
La sombra de la oligarquía: el 1% más rico del planeta concentra más riqueza que el 95% de la población global
Oxfam Intermón ha lanzado una advertencia sobre la desigualdad extrema en el planeta, según un informe publicado en el marco de las sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas. El análisis revela que el 1% más rico del planeta posee más riqueza que el 95% de la población mundial en conjunto.
La influencia de los milmillonarios
Según el informe, la influencia de los milmillonarios sobre la economía se ha disparado, ya que más de un tercio de las 50 mayores empresas del mundo tienen a un milmillonario como director ejecutivo o accionista principal. La capitalización bursátil total de estas empresas asciende a 13,3 billones de dólares.
La hiperconcentración de poder y riqueza
Oxfam advierte que, en una era de oligarquía global, los esfuerzos globales para responder a los mayores desafíos del planeta, como la crisis climática o los niveles persistentes de pobreza y desigualdad, están siendo amenazados por la concentración de poder en manos de los ultrarricos y las megaempresas. Esta hiperconcentración de poder y riqueza alimenta la desigualdad tanto dentro de los países como entre ellos.
El 79% de la población mundial solo cuenta con el 31% de la riqueza global, según el informe. Los países del Sur global, que representan el 79% de la población mundial, solo cuentan con el 31% de la riqueza global.
La oligarquía mundial
La sombra de la oligarquía mundial se cierne sobre la Asamblea General de las Naciones Unidas. Los ultrarricos y las megaempresas que ellos controlan están conformando las reglas del juego a su favor, a costa del resto de la población. Las Naciones Unidas están perdiendo capacidad de acción frente al poder creciente de los milmillonarios, ha afirmado el director de Oxfam Intermón, Franc Cortada.
Control de los activos financieros globales
El informe destaca que el 1% más rico posee el 43% de todos los activos financieros globales y que dos multinacionales son propietarias del 40% del mercado mundial de semillas. Las tres grandes gestoras de fondos estadounidenses (BlackRock, State Street y Vanguard) gestionan 20 billones de dólares en activos, cerca de una quinta parte de todos los activos de inversión en todo el mundo.
La desigualdad extrema y el multilateralismo
La desigualdad extrema juega un papel clave en la erosión del multilateralismo, según Oxfam. En los últimos años, los ultrarricos y las empresas con mayor poder han utilizado su enorme influencia para frenar los esfuerzos para resolver los principales problemas del planeta, como la lucha contra la evasión y la elusión fiscal, asegurar que las vacunas contra la covid sean accesibles para todas las personas, o cancelar las deudas insostenibles de los países del Sur global.
Oxfam insta a la acción multilateral para impulsar un nuevo marco de fiscalidad internacional, la cancelación de la deuda pública y nuevas leyes de propiedad intelectual frente a futuras pandemias. Solo un multilateralismo basado en la equidad y justicia puede revertir la intensificación del poder de una oligarquía global. Algunos líderes mundiales están demostrando ser conscientes de ello y han incrementado sus esfuerzos contra la desigualdad. Pero tienen que ser más y con mayor fuerza, ha insistido Cortada.
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