El Partido Popular (PP) ha decidido intensificar su estrategia en favor de la justicia social, con el objetivo de golpear fuerte en el terreno del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Esta decisión llega en un momento clave, en el que la desigualdad económica y la pobreza siguen siendo dos de los principales problemas que enfrenta la sociedad española. El PP busca posicionarse como una fuerza política comprometida con la igualdad de oportunidades y la protección de los más vulnerables, y de esta manera, ganar terreno en la opinión pública y debilitar la influencia del PSOE.
El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha presentado una ambiciosa estrategia social para atraer a los jóvenes que se sienten cansados de no recibir respuestas a sus problemas sociales, y que han apoyado tradicionalmente al PSOE y Podemos.
Feijóo ha decidido apostar por la justicia social y la conciliación familiar para acercar al PP al electorado joven y desesperado. Esta estrategia se basa en la percepción de que existe un electorado de entre 29 y 44 años que, habiendo votado en los últimos años al PSOE o a Podemos, siente desesperanza al no recibir soluciones a sus problemas, como la complejidad de acceder a una vivienda pese a ser asalariado.
Un plan de vivienda para jóvenes
En abril, el PP presentó un plan de vivienda con ayudas específicas para jóvenes. Esta incluye una bonificación del 100% en el Impuesto de sucesiones y donaciones de las cantidades donadas a familiares para la adquisición de primera vivienda para menores de 35 años, y una deducción del 100% de las rentas de los propietarios que formalicen nuevos contratos de arrendamiento de viviendas que hayan estado en desuso dos años y que sirvan como residencia habitual de jóvenes con una duración de al menos tres años, entre otras medidas.
Una EBAU común para todas las comunidades
A principios de julio, el PP presentó su plan para implementar una EBAU con criterios comunes en las 14 comunidades que gobierna.
Un plan de conciliación familiar
La propuesta de Feijóo consiste en ampliar a veinte semanas el permiso por nacimiento de hijo, tanto el del padre como el de la madre. Además, piden que eliminar la obligatoriedad de que el padre se coja las seis semanas nada más nazca el bebé y que, por lo contrario, puedan ser disfrutadas cuando más interese a la familia del recién nacido.
Fuentes populares explican que en la propuesta no se contempla que se transfieran semanas del permiso del padre a la madre. Lo que se pide es que el permiso del padre se pueda ejecutar en el momento que por conciliación o por preferencia personal mejor convenga. Es decir, libertad de elección, añaden.
Con todo lo anterior, el PP de Feijóo busca atraer a los jóvenes cansados de no recibir respuestas a sus problemas sociales aun habiendo apoyado a un Gobierno formado por PSOE y Sumar. Los populares aspiran a que toda esta gente desesperada vea que el PP puede darles una alternativa, más aún después de que Pedro Sánchez haya renunciado a que reluzcan sus políticas sociales.
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