- La desigualdad laboral y económica afecta a personas con discapacidad intelectual en Cataluña: solo el 1% está empleado y la mayoría obtiene una pensión inferior a 440 euros al mes
- La desigualdad laboral y económica afecta a personas con discapacidad intelectual en Cataluña
- La exclusión laboral y económica
- La realidad de las personas con discapacidad intelectual
La desigualdad laboral y económica afecta a personas con discapacidad intelectual en Cataluña: solo el 1% está empleado y la mayoría obtiene una pensión inferior a 440 euros al mes
La comunidad autónoma de Cataluña enfrenta un problema social y económico preocupante: la desigualdad laboral y económica que afecta a las personas con discapacidad intelectual. Según los últimos datos, solo el 1% de estas personas tiene un empleo, lo que las condena a vivir en situación de pobreza y exclusión social. Además, la mayoría de ellas recibe una pensión inferior a 440 euros al mes, una cantidad insuficiente para cubrir sus necesidades básicas. Esta situación es un llamado a la acción para las autoridades y la sociedad civil, que deben trabajar juntos para promover la inclusión laboral y social de las personas con discapacidad intelectual y garantizar su acceso a oportunidades y recursos para mejorar su calidad de vida.
La desigualdad laboral y económica afecta a personas con discapacidad intelectual en Cataluña
La Federación Catalana de la Discapacidad Intelectual (Dincat) y Granés Fundació han presentado este jueves el Segundo informe de la situación de las personas con discapacidad intelectual en Catalunya, que revela una situación de desigualdad laboral y económica que afecta a este colectivo.
Solo 1 de cada 100 personas con discapacidad intelectual tiene trabajo en Cataluña, según el informe. Además, la pensión media no contributiva de las personas con discapacidad intelectual y de desarrollo (DID) se sitúa por debajo de los 440 euros mensuales, lo que representa solo el 44% del salario bruto mínimo interprofesional.
La exclusión laboral y económica
El informe critica que más de 3.800 personas siguen esperando para acceder a centros residenciales y que 1 de cada 3 mujeres con discapacidad intelectual no ha ido nunca a una consulta ginecológica. Estas cifras reflejan la exclusión laboral y económica que enfrentan las personas con discapacidad intelectual en Cataluña.
Las organizaciones han reivindicado la necesidad urgente de impulsar políticas públicas que aborden esta situación, como el desarrollo de una estrategia global de inserción laboral, la actualización de la Cartera de Servicios Sociales y el impulso de un sistema educativo inclusivo.
La realidad de las personas con discapacidad intelectual
El informe concluye que las personas con DID se enfrentan a múltiples retos, que abarcan desde la educación, la ocupación y la vivienda hasta la participación política o el ejercicio de la capacidad jurídica. Estas dificultades provocan que las personas con DID sufran situaciones de desigualdad, discriminación y vulneración de derechos.
La presentación del informe contó con la asistencia de la consellera de Derechos Sociales e Inclusión, Mònica Martínez Bravo, y los representantes de Dincat y Granés Fundació. El presidente de Dincat, José Carlos Eiriz, y la directora gerente de Granés, Laura Masferres, también participaron en el acto.
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