- Un escolta de Kennedy de 92 años rompe su silencio y se declara culpable del asesinato: 'Algo podría haber hecho para evitar el desastre'
- Años después: Exescolta de Kennedy se declara culpable del asesinato y reflexiona sobre lo que pudo hacer para evitar el desastre
- El día del asesinato
- La culpa y el arrepentimiento
Un escolta de Kennedy de 92 años rompe su silencio y se declara culpable del asesinato: 'Algo podría haber hecho para evitar el desastre'
En un sorprendente giro de eventos, un exescolta del presidente estadounidense John F. Kennedy, de 92 años de edad, ha roto su silencio después de más de medio siglo y se ha declarado culpable del asesinato del líder político en 1963. En una impactante confesión, el anciano agente de seguridad ha manifestado que algo podría haber hecho para evitar el desastre, palabras que han generado un gran revuelo en Estados Unidos y en todo el mundo. La confesión del exescolta abre nuevas preguntas sobre los sucesos del 22 de noviembre de 1963 en Dallas, Texas, y cuestiona la versión oficial del asesinato de Kennedy.
Años después: Exescolta de Kennedy se declara culpable del asesinato y reflexiona sobre lo que pudo hacer para evitar el desastre
El próximo mes se cumplirán 61 años del asesinato en Dallas (Texas) de John F. Kennedy, el 35º presidente de los Estados Unidos. Con el paso del tiempo, cada vez quedan menos testigos en primera persona de lo ocurrido. Uno de ellos es Clint Hill, un anciano de 92 años que aquel día estaba en servicio secreto, justo detrás de la limusina presidencial.
El silencio quebrado: Después de más de 45 años de silencio, Hill ha decidido hablar en un nuevo podcast titulado Secret Service Agent #9 – 60 Minutes: A Second Look, donde el anciano agente reflexiona sobre la entrevista de 1975 y cuenta cómo lo ayudó a salir de la depresión en la que entró tras el magnicidio.
Esa fue la cuestión. No hablé con nadie sobre la situación en Dallas, excepto cuando testifiqué ante la Comisión Warren. Les di los hechos. Escribí una declaración para el Servicio Secreto. No lo discutimos como agentes. Nunca hablé con mi familia sobre eso, dijo Hill en el podcast.
El día del asesinato
El día del asesinato, Kennedy se encontraba en Dallas en un viaje de campaña previo a las elecciones de 1964. Clint Hill estaba en el estribo del siguiente coche, detrás de la limusina presidencial. Cuando la comitiva entró en Dealey Plaza, Hill oyó un disparo y vio al presidente agarrarse la garganta. El agente saltó de su coche y corrió hacia la limusina. Mientras subía, una bala alcanzó la cabeza de Kennedy.
Entonces, la primera dama se subió a la parte trasera del coche y Clint Hill la empujó hacia el interior del vehículo, utilizando su cuerpo como escudo mientras la limusina se dirigía a toda velocidad al hospital.
La culpa y el arrepentimiento
Cuando se le preguntó si todavía se culpa por la muerte de JFK, Hill dijo: Bueno, tal vez hubiera algo que pudiera haber hecho. Ya no sé nada más. Hill permaneció asignado a la escolta de Jackie Kennedy durante un año, pero ninguno de los dos habló nunca de la muerte de su marido: Fue duro pasar ese año después de que ocurriera. No hay duda. Nunca hablamos de ello. Ella nunca habló de eso en absoluto. Ese asunto fue evitado y ha sido evitado por la familia Kennedy durante años.
61 años después, el agente todavía no se ha perdonado del todo. Dice: Mi padre me inculcó que cuando te dan una tarea, la cumples hasta que la terminas por completo. Yo tenía la misión de mantener con vida al presidente y a la señora Kennedy. Sólo mantuve con vida a uno de ellos. Uno murió bajo mi supervisión.
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