En un conmovedor llamado a la solidaridad y la compasión, Emily, una adorable gatita que ha perdido la vista, busca una familia amorosa que la acoge en su hogar y le brinde el cariño y la atención que merece. A pesar de su discapacidad, esta valiente gatita ha demostrado que es capaz de hacer una vida absolutamente normal, adaptándose a su nueva condición con una gran entereza y determinación. Su historia conmueve y emociona a todos aquellos que la conocen, y es por eso que esperamos que alguien especial sepa ver más allá de su discapacidad y le brinde una oportunidad de vivir una vida llena de amor y felicidad.
Gatita sin vista busca amor: Emily, una historia de supervivencia y felicidad
Según los datos del último estudio realizado por la Fundación Affinity, casi la mitad de los gatos (un 48,7 por ciento) que llegan al refugio son adoptados por una nueva familia. Sin embargo, también los felinos son los más abandonados, siendo las camadas no deseadas el principal motivo de abandono en España.
Un total de 115.970 gatos fueron recogidos por asociaciones y protectoras de animales durante 2023 y, después de pasar meses en casas de acogida o cheniles en refugios de asociaciones de protección animal, casi la mitad vuelven a conocer lo que es un hogar y el cariño de una familia.
No obstante, ¿qué ocurre con los que no logran abandonar el refugio? El estudio de la fundación explica cómo existen algunas características de los animales que actúan como barrera a la hora de ser adoptados. Aunque en el texto se refieren únicamente a los perros, la realidad es que algunas aplican también a los gatos, tal y como reclaman las protectoras de animales.
El color negro, la edad avanzada o que padezcan alguna enfermedad o problema de salud, son algunos de los motivos que echan para atrás adopciones y convierten a algunos gatos en los invisibles del refugio. Un ejemplo de esto es Emily, una gatita de tres meses y medio que llegó a la protectora 7 Vidas de Bizkaia sin ojos y con una orejita pequeña (de no haberle crecido cuando era cachorra).
Emily es una gata sin historia. Yolanda, voluntaria de la asociación, cuenta que no saben nada del pasado de Emily. La entregaron en la policía junto a otra gatita (Mindy), seguramente víctimas del abandono, relata. No parecían hermanas por tamaño y apariencia.
La policía las llevó al servicio de recogida y allí estuvieron en una jaula hasta poderlas sacar a una casa de acogida, agrega. Tiene unos tres meses y medio y no tenemos más información sobre ella, solo que llegó ya así, sin ojitos y con una orejita de bebé que no le ha crecido.
Desde la protectora aseguran que se trata de una gata muy buena y muy agradecida, aunque también saca su genio cuando algún otro gato la agobia. Ahora que ya conoce más la casa (de acogida), viene al sofá y siempre se pega a ti, le gusta el contacto, afirma Yolanda.
Emily es una gatita muy simpática que, a pesar de no ver, hace vida completamente normal y, sin duda, tiene mucho amor que dar, insiste la voluntaria. Para adoptarla solo hay que rellenar el formulario de adopción, escribirnos un correo o ponerse en contacto a través de nuestra página web.
Desde la protectora, están buscando una familia responsable que esté dispuesta a darle un nuevo hogar y mucho cariño a Emily. No solemos pedir las redes de protección, pero evidentemente es lo que toda familia felina debería tener, expresan.
Remarcamos mucho esto porque, si no tienes redes y quieres airear habría que mover a la gata a otra habitación, pero puede que nos olvidemos o que estemos a otra cosa y sería peligroso, especialmente con Emily, que no ve, recalca Yolanda.
Además, a las voluntarias les gustaría encontrar una familia que ya tenga más gatos o, si no, animan a los adoptantes a llevarse otro más junto a Emily. Sería conveniente porque, aunque es un poco bruta jugando, ella interactúa mucho con los demás, concluye.
¿Quieres ser el hogar para Emily? ¡Rellena el formulario de adopción y dale un nuevo hogar a esta gatita especial!
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