La inteligencia de EE.UU. estima que Rusia preferiría a Trump e Irán a Harris
En un informe confidencial, la inteligencia de los Estados Unidos ha revelado que Rusia tiene una preferencia clara por el expresidente estadounidense, Donald Trump, en lugar de la actual vicepresidenta, Kamala Harris. Esta evaluación sorprendente sugiere que la estrategia política de Rusia se centra en mantener una buena relación con Trump, quien ha mantenido una postura amistosa hacia el país eslavo. Además, el informe también destaca que Irán también se encuentra en la lista de preferencias rusas, lo que genera inquietud en los círculos políticos estadounidenses. En este contexto, se abre un debate sobre las implicaciones geopolíticas de esta situación y las posibles consecuencias para la política internacional.
La inteligencia de EEUU detecta injerencia extranjera en elecciones, con Rusia a favor de Trump
La Oficina del Director de Inteligencia Nacional estadounidense (ODNI) ha destacado este lunes que, a menos de un mes de las presidenciales, sigue habiendo injerencia extranjera en esos comicios y ha precisado que Rusia prefiere al expresidente y candidato republicano, Donald Trump, e Irán a la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris.
Según la ODNI, Rusia busca influir en las elecciones al Congreso, particularmente para alentar al público a oponerse a políticas y políticos pro Ucrania. Por su parte, China trata de influir en las elecciones al Congreso con candidatos que, independientemente de su afiliación partidista, Pekín considere que amenaza sus intereses fronterizos, especialmente en relación con Taiwán.
La injerencia extranjera intenta minar la confianza en los procesos democráticos y exacerbar la división en la sociedad, además de dar forma a las preferencias de los votantes. La ODNI también destacó que esas campañas no acabarán el día de los comicios, sino que continuarán poniendo en cuestión la validez de los resultados tras el cierre de las urnas.
Además, la ODNI precisó que hasta la fecha no ha detectado esfuerzos extranjeros para atacar la integridad de los sistemas de votación en sí, sino que gran parte de la actividad percibida son operaciones de influencia e información. Adam Clayton Powell, director ejecutivo de la Iniciativa de Ciberseguridad Electoral de la Universidad de Carolina del Sur (USC), destacó que es muy difícil cambiar una elección estadounidense mediante el hackeo, pero lo que sí se puede hacer es sembrar dudas sobre los candidatos y más todavía sobre la democracia.
El próximo 5 de noviembre, además de elegir a su futuro presidente, los estadounidenses votarán la renovación de toda la Cámara de Representantes y de un tercio del Senado. La ODNI también destacó que algunos actores extranjeros, particularmente Rusia, China y Cuba, están apoyando o denigrando a candidatos involucrados en elecciones legislativas, estatales o públicas para determinar a qué candidatos apoyar u oponerse.
En cuanto a la situación actual, la vicepresidenta Kamala Harris se sitúa en cabeza en las intenciones de voto, con una ventaja de 2,6 puntos porcentuales respecto a Donald Trump, según la media de encuestas efectuada por la web FiveThirtyEight a nivel federal.
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