¿Inyecciones antiobesidad para personas con paro? Los expertos se dividen entre la percepción negativa y el acceso a un tratamiento costoso

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¿Inyecciones antiobesidad para personas con paro? Los expertos se dividen entre la percepción negativa y el acceso a un tratamiento costoso

La obesidad es un problema de salud pública que afecta a millones de personas en todo el mundo. En este contexto, surge una pregunta controvertida: ¿deben las personas con paro cardíaco tener acceso a inyecciones antiobesidad como tratamiento para su condición? La respuesta no es unánime. Mientras algunos expertos consideran que este tratamiento es una opción costo-efectiva para mejorar la salud de los pacientes con paro, otros lo ven como una opción costosa y de dudosa eficacia. En este artículo, exploraremos las opiniones divididas de los expertos y los argumentos a favor y en contra de este polémico tratamiento.

Inyecciones antiobesidad para parados: ¿Una solución o un problema?

El Gobierno de Reino Unido está estudiando la posibilidad de administrar inyecciones adelgazantes a personas en paro con obesidad para analizar su impacto en la reactivación laboral. Esta idea ha generado controversia entre los especialistas en el ámbito del empleo y la salud.

El Gobierno británico defiende la medida

El Gobierno británico defiende la medida

Según el primer ministro, Keir Starmer, la idea podría ser muy beneficiosa. El ministro de Sanidad, Wes Streeting, afirmó que nuestros cinturones cada vez más anchos también están imponiendo una carga significativa a nuestro servicio de salud, costando 11.000 millones de libras (13.090 millones de euros) al año, incluso más que fumar.

La propuesta surge después de que la farmacéutica Eli Lilly, fabricante del fármaco Mounjaro, llegara a un acuerdo con las autoridades de Manchester para realizar un estudio durante cinco años para buscar evidencia sobre el impacto de estos tratamientos en la situación laboral de las personas.

Críticas y objeciones

La profesora titular de Psicología del Trabajo de la Universidad Complutense de Madrid, Gloria Castaño, considera que la medida no va al problema y recuerda que el éxito laboral no depende del peso de una persona, sino de que tenga las competencias y las características necesarias para desempeñar una posición dentro de una organización y para ajustarse tanto al puesto como a la entidad en la cual va a ser seleccionado.

Castaño afirma que la medida puede estigmatizar a las personas con obesidad y que el problema no es el sobrepeso, sino que hay incidir en la cualificación de las personas, en las competencias laborales y las actitudes hacia la ocupación.

El punto de vista médico

La doctora Andreea Ciudin, coordinadora de la unidad de obesidad del Hospital Vall d'Hebron, considera que poder medicar durante cinco años a pacientes con obesidad que, de otra forma, no se podrían permitir tratamientos que cuestan en España entre 250 y 360 euros, sería genial desde el punto de vista médico y humano porque favorece el acceso y la financiación de un tratamiento farmacológico basado en la biología de la obesidad a personas que lo necesitan.

Ciudin admite que habría que explicarlo muy bien para evitar que la medida sea percibida como estigmatizante.

La reinserción laboral y la obesidad

La doctora Ciudin destaca que el impacto en la calidad de vida y la funcionalidad física de las personas con obesidad que reciben tratamiento es positivo, pero advierte que en la vuelta al mercado laboral influyen más factores además del buen estado de ánimo o haber perdido peso.

Castaño coincide en que no hay una relación de causa-efecto entre tener sobrepeso y estar en paro, y que las personas pueden tener sobrepeso y ser activas en la búsqueda de empleo, o no tener sobrepeso y ser pasivas.

La posible replicación en España

La doctora Ciudin asegura que, como médico, apoyaría la medida para darle tratamiento a pacientes que de otra forma no pueden permitírselo. Sin embargo, considera que habría que replantear el objetivo de la reinfección laboral y explicarlo muy bien para evitar la estigmatización.

La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) también ha expresado sus reservas sobre la propuesta británica, argumentando que es una forma más de estigmatizar la enfermedad y que la obesidad es una enfermedad muy compleja que no se puede simplificar.

Marina Ramírez

Soy Marina, una autora apasionada por la actualidad nacional española. En Diario Online, un periódico independiente, comparto mis análisis y opiniones sobre los eventos más relevantes de nuestro país. Con mi pluma perspicaz y mi compromiso con la verdad, busco ofrecer a los lectores una visión objetiva y completa de la realidad que nos rodea. ¡Acompáñame en este apasionante viaje a través de las noticias más importantes de España!

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