La reciente boda entre Almeida y Teresa Urquijo ha captado la atención de todos por los exquisitos detalles que envolvieron la celebración. El menú seleccionado para el banquete fue cuidadosamente elaborado, destacando platos tradicionales con un toque de modernidad. La localización escogida para la ceremonia y fiesta no pudo ser más idílica, un entorno que enmarcó perfectamente cada momento especial. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención ha sido la inclusión de la 'recena', una práctica cada vez más popular que ofrece a los invitados la oportunidad de seguir disfrutando de delicias culinarias durante la madrugada. Esta boda ha marcado un precedente en cuanto a la combinación de elegancia y originalidad en cada detalle.
Juan Carlos I se une al banquete de la boda de Almeida y Teresa Urquijo en La Cruz del Canto
El exmonarca Juan Carlos I ha llegado a la finca La Cruz del Canto para sumarse al banquete nupcial de la boda entre José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo. La celebración ha tenido lugar en los terrenos de la propiedad de la abuela de la novia, Teresa de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma, en Colmenar Viejo, a las afueras de Madrid. La boda ha reunido a alrededor de 600 invitados, entre ellos destacadas personalidades como Simoneta Gómez-Acebo y el entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone.
Detalles del banquete y 'recena' en la boda de Almeida y Teresa Urquijo
El banquete nupcial ha sido servido en la finca de La Cruz del Canto, donde se ha ofrecido un exquisito menú que incluyó salpicón de marisco y solomillo de Wagyu a baja temperatura, seguido de dos postres alternos. Las mesas del banquete llevaban nombres emblemáticos de la capital, como la Puerta del Sol o el Parque del Retiro. La reina Sofía, quien no estuvo presente en la ceremonia religiosa, se unió al banquete posterior en la finca. Se espera que la celebración culmine alrededor de la medianoche con una 'recena' que incluirá quesos, embutidos, minipizzas y perritos calientes, además de barra libre de vinos, cervezas y copas.
El legendario restaurante madrileño Lhardy, preferido por Juan Carlos I, ha sido el encargado de elaborar y servir todo el banquete. Entre plato y plato, los invitados disfrutarán de baile, que el alcalde y la novia han ensayado previamente a pesar de las ocupaciones habituales del edil.
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