Vodafone lleva a cabo un drástico ajuste en su estructura: reduce su plantilla en un 27% y rebaja sus tarifas hasta el mínimo
En un movimiento que busca recuperar la competitividad en el mercado de las telecomunicaciones, Vodafone ha decidido llevar a cabo un drástico ajuste en su estructura. Esto implica una reducción significativa de su plantilla, que se verá disminuida en un 27%. Esta medida busca racionalizar costos y mejorar la eficiencia en la empresa. Además, Vodafone ha anunciado que rebajará sus tarifas hasta el mínimo, con el fin de atraer más clientes y mejorar su posición en el mercado. Esta noticia ha generado un gran impacto en la industria y ha sido recibida con expectación por parte de los consumidores.
Vodafone reduce plantilla en un 27% y rebaja tarifas hasta el mínimo
El nuevo CEO de Vodafone, José Miguel García, ha presentado una estrategia agresiva para retomar el crecimiento sostenible en el mercado español. Dos meses después de asumir el cargo, García ha llevado a cabo dos medidas importantes: un recorte de la plantilla del 27% y una reducción de tarifas cercana a las de operadoras de medio y bajo coste.
El ajuste de la plantilla
Después de un mes de tensión en los equipos, Vodafone España ha cerrado el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 898 trabajadores, un 27% del equipo total de la empresa en España. La negociación con los sindicatos ha sido tensa, pero finalmente se han alcanzado acuerdos sobre las indemnizaciones, que serán similares a las establecidas para el despido improcedente.
Nuevas tarifas para competir
La otra medida relevante es la reducción de tarifas, que se sitúan ahora en un rango similar al de operadoras de medio y bajo coste, como O2. La puerta de entrada de los paquetes convergentes está en 35 euros, y se flexibiliza la configuración de los paquetes para reducir las facturas. Estos precios se sitúan lejos de los de Movistar y Orange, y por debajo de otros operadores como Yoigo.
La estrategia de Zegona
La compra de Vodafone España por parte de Zegona ha llevado a un esfuerzo para cubrir los intereses de la deuda, que ascienden a más de 160 millones de euros al año. Para lograr un crecimiento sostenible, Zegona ha decidido apostar por una estrategia agresiva, que incluye la reducción de costos y la rebaja de tarifas. La empresa también ha lanzado una ofensiva comercial con la incorporación de la televisión en su marca de bajo coste, Lowi, y la renegociación de contratos con proveedores audiovisuales.
El contexto del mercado
El mercado español de telecomunicaciones es muy competitivo, con cuatro operadores principales: Telefónica y Masorange a una distancia muy grande, y Digi que sigue con una propuesta comercial de ultra bajo coste. Las segundas marcas de los grandes operadores también están empujando, y otros operadores más pequeños como Avatel o Finetwork han afilado el cuchillo en las portabilidades. En este contexto, Zegona comienza a enseñar sus cartas, y aunque trate de sacudirse la etiqueta de competidor agresivo, la realidad es que la agresividad es lo que está marcando estas primeras decisiones.
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