En un giro inesperado en el caso del asesinato de un joven hombre, su hermano y novia han lanzado una acusación impactante contra la víctima. Según ellos, el fallecido era el cerebro detrás del robo de droga que se produjo en la zona. Afirmaciones que han generado un gran escándalo y han llevado a la opinión pública a cuestionar la veracidad de estas declaraciones. En este artículo, analizaremos los detalles de esta extraña situación y exploraremos las posibles implicaciones que esta acusación puede tener en el caso.
Novia y hermano del fallecido incriminan a la víctima en un crimen de droga
En la segunda sesión del juicio con jurado popular contra cuatro de los presuntos autores del asesinato de un hombre en una urbanización de Tordera (Barcelona), la novia y el hermano del fallecido han insinuado que la víctima y su amigo podrían haber robado marihuana días antes a los acusados.
El hermano del fallecido, que no tenía muy buena relación con él, declaró que la novia de este le había confesado que su hermano y un amigo habían ido a dar un palo a Caldes de Malavella (Girona) y se habían llevado 5 bolsas de marihuana, pero que las cosas no habían salido según lo previsto.
La novia del fallecido, que había estado con él durante más de un año, declaró que una semana antes del crimen él recibió la llamada de un conocido que le dijo que desde su casa de Caldes de Malavella veía una plantación de marihuana y que sí se la quitaban. Había gente que tenía cultivos de hierba y él se dedicaba a moverla, reconoció la testigo.
La Fiscalía sostiene que los acusados actuaron conjuntamente y con el claro ánimo de acabar con la vida de la víctima o conociendo y asumiendo que como consecuencia de su conducta podrían quitarle la vida y que le dieron varios tiros con un arma de fuego.
La novia del fallecido también declaró que el día anterior al crimen, el viernes 10 de junio de 2022, vio una furgoneta aparcada frente al edificio de Tordera (Barcelona) en el que residían tanto el fallecido como su amigo, y que al día siguiente, el sábado, la furgoneta seguía ahí, encendida, y que después de que su novio se fuese a tomar un café con un conocido se lió la tangana.
Ella también relató que escuchó muchos golpes, como si estuviesen matando a alguien en el piso de arriba y varias detonaciones que describió como disparos o petardos, y que vio salir por la parte de atrás del edificio a tres personas que se subieron en una furgoneta y huyeron del lugar.
La Fiscalía les atribuye a los acusados la autoría de un delito de asesinato con el propósito de facilitar la comisión de otro delito, una tentativa de robo con violencia en casa habitada con uso de armas, un delito de maltrato de animal doméstico con uso de armas peligrosas para la vida del animal, y un delito de tenencia ilícita de armas de fuego.
Solicita para todos ellos un total de 27 años de prisión, así como que indemnicen de forma conjunta a los padres de la víctima con 150.000 euros a cada uno por la pérdida de su hijo y al hermano con 90.000 euros.
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