Si está buscando un destino turístico que combine historia, belleza natural y tranquilidad, Alicante es el lugar perfecto para visitar en otoño. Ubicada en la costa mediterránea, esta ciudad española es conocida como la perla del Levante debido a su arquitectura medieval, sus playas de ensueño y su entorno natural incomparable. A diferencia de otros destinos turísticos, Alicante no sufre la aglomeración de turistas en otoño, lo que la hace ideal para aquellos que buscan un viaje relajante y auténtico. En este artículo, descubrirá el encanto de Alicante y por qué es un pueblo perfecto para visitar en otoño, con su castillo medieval, sus playas de ensueño y su rica historia.
Descubre el encanto de Moraira, la perla del Levante, sin la aglomeración de turistas
La llegada del otoño a España hace que la gran mayoría de turistas ya no piensen en playas, sol y mar, y en su lugar opten por hacer escapadas a alguna ciudad de Europa o a la montaña. Pero nada más lejos de la realidad. A pesar de que las temperaturas ya no son tan altas, siempre se puede hacer una pequeña excursión a orillas del Mediterráneo para disfrutar de increíbles parajes costeros, y pocos lugares hay más idóneos para ello que el pueblo alicantino de Moraira.
Este núcleo de población de solo 1.600 habitantes pertenece al término municipal de Teulada, y en él podrás visitar tanto impresionantes calas bañadas por aguas turquesas como un gran patrimonio arquitectónico y natural. Por ello, si todavía te resistes a dejar de ver el mar hasta el próximo verano de 2025, pasar un fin de semana en Moraira es una de las mejores opciones para hacer una escapada otoñal por España.
Un pueblo con tradición pesquera en el Mediterráneo
En la propia web de turismo de Teulada Moraira se ofrece un recorrido por las calles más increíbles de la localidad, comenzando por su pintoresco barrio marinero. Sus estrechas callejuelas repletas de casas blancas dan a parar al club náutico, desde el cual se puede ir hasta la preciosa Iglesia de Nuestra Señora de los Desamparados. Además, a apenas unos cuatro minutos del templo se puede subir a la joya de la corona del pueblo: su impresionante castillo.
Esta fortaleza defensiva fue erigida en el siglo XVIII con la finalidad de vigilar la Playa de L'Ampolla. Su peculiar estructura y su extraordinaria mampostería hacen de ella uno de los principales atractivos turísticos de Moraira, y además es uno de los mejores puntos para iniciar la última parte del recorrido por la localidad, que comienza en el arenal que está justo al lado de la torre.
Playas de ensueño y castillo medieval
La Playa de L'Ampolla es la más concurrida de la localidad debido a que se encuentra en pleno núcleo urbano. Este arenal de 250 metros de longitud se caracteriza por sus aguas tranquilas y su dorada arena, y aunque el otoño no sea la época ideal para bañarte en el Mediterráneo, no puedes dejar de pasear por este impresionante entorno antes de encarar la última parada del itinerario.
Desde la playa se puede acceder a la espectacular Marjal del Semillar, un increíble humedal formado por pequeñas lagunas a apenas unos metros del mar en las que desemboca la cuenca del Barranc de les Sorts. Además, es un entorno con una gran biodiversidad, por lo que desde 2004 obtuvo el estatus de Reserva de Fauna Silvestre.
Otras playas que ver cerca de Moraira
Si las temperaturas otoñales no son un impedimento para ti y lo que quieres es bañarte en el mar, cerca de Moraira hay calas ideales para hacerlo (además de la Playa de L'Ampolla). A apenas un kilómetro del castillo se encuentra la Cala del Portitxolet, mientras que un poco más lejos puedes relajarte en la Cala del Portet y contemplar desde su mirador la Península del Cap d'Or y su preciosa torre.
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