Aurelia, la madre abnegada de Alberto, con discapacidad: 'La sociedad avanzará un gran paso cuando seamos reconocidos'

Aurelia, la madre abnegada de Alberto, con discapacidad: 'La sociedad avanzará un gran paso cuando seamos reconocidos'

En un testimonio conmovedor, Aurelia, la madre de Alberto, un joven con discapacidad, destaca la importancia de la inclusión y el reconocimiento de las personas con discapacidad en la sociedad. Con una dedicación abnegada y un amor incondicional, Aurelia ha sido el pilar fundamental en la vida de su hijo, luchando incansablemente por su bienestar y su integración en la sociedad. En esta emotiva entrevista, Aurelia nos habla sobre la lucha diaria de las personas con discapacidad y sus familiares, y nos recuerda que la sociedad avanzará un gran paso cuando seamos reconocidos, subrayando la necesidad de un cambio en la percepción y el trato hacia las personas con discapacidad.

La lucha de Aurelia por el reconocimiento de las cuidadoras: 'No podemos seguir sin ser valoradas'

Aurelia Jerez es la cuidadora de su hijo Alberto, un joven de 17 años que sufre de una discapacidad del 100%. Además, es la presidenta de la Coordinadora Estatal de Plataformas de Dependencia. En una entrevista, Aurelia nos compartió su historia y su lucha por el reconocimiento de las cuidadoras.

Una vida dedicada al cuidado

Aurelia lleva 17 años cuidando de su hijo Alberto, desde el día de su nacimiento. Al principio, como en todas las familias en las que ocurre algo así, nos inundaron las dudas, el miedo al futuro y una inmensa tristeza por la situación del niño. A los 15 días, más o menos, decidimos que regodearnos en nuestro dolor era un lujo que no nos podíamos permitir, le hacíamos falta a nuestro hijo; y simplemente nos levantamos y empezamos a luchar por él.

Para Aurelia, el cuidado de Alberto ha sido un proceso de adaptación y renuncia. He renunciado a seguir desarrollando mi trabajo fuera de casa, y nuestro ocio va siempre en función de la situación de Alberto y sus necesidades.

La lucha por el reconocimiento

Aurelia es parte de la Plataforma Estatal de Cuidadoras No Profesionales, que busca el reconocimiento de la labor de las cuidadoras principales como cualquier trabajo más. El reconocimiento de la labor de las cuidadoras principales como cualquier trabajo más; la eliminación de las incompatibilidades establecidas en julio de 2012; la jubilación anticipada de aquellas cuidadoras que compatibilizan los cuidados con el trabajo reglado; la eliminación del término 'cuidadoras no profesionales', ya que esta denominación denota menos valor que cualquier servicio profesional, y esto no es cierto; equiparación salarial con el SMI para el grado III, y en la misma proporción para los grados I y II; subsidio de desempleo para cuando después de muchos años dejamos de cuidar, ya que nos encontramos fuera del mercado laboral y con escasas posibilidades de reincorporarnos; y un plan de emergencia establecido para aquellas cuidadoras que tienen que dejar de cuidar para atender su salud: operaciones, fracturas… y que la mayoría de las veces desatienden por no disponer de un servicio que atienda a su familiar con dependencia.

Aurelia destaca que una figura externa nunca podrá suplir la tarea de las cuidadoras principales. Es completamente imposible que un cuidador externo realice las mismas funciones que las cuidadoras principales, empezando por el tiempo de dedicación, nosotras cuidamos 24 horas diarias durante 365 días al año, algo impensable para cualquier trabajador. Otro punto a tener en cuenta es que ningún profesional conoce las especificidades de cada dependiente, cada uno es un mundo con necesidades distintas y personales.

Un mensaje para la sociedad

Para concluir, Aurelia lanza un mensaje a la sociedad: Ya es hora de que la labor que llevamos desarrollando desde hace miles de años las cuidadoras sea reconocida social, laboral y económicamente. El día que esto sea así, nuestra sociedad habrá dado un paso de gigante.

La sociedad avanzará cuando seamos reconocidos, afirma Aurelia. Es hora de que se valore la labor de las cuidadoras y se les brinde el reconocimiento que merecen.