Barcelona aportará este mandato 22 hectáreas de espacio verde gracias a 71 actuaciones en toda la ciudad
La ciudad de Barcelona da un paso importante hacia la sostenibilidad y el bienestar ciudadano con la creación de 22 hectáreas de espacio verde en todo el término municipal. Gracias a un ambicioso plan de acción que contempla 71 actuaciones en diferentes barrios y distritos, la ciudad contará con nuevos parques, jardines y zonas verdes que mejorarán la calidad de vida de sus habitantes. Esta iniciativa forma parte de la apuesta de la administración municipal por mejorar la calidad del aire, fomentar la biodiversidad y reducir el impacto ambiental en la ciudad. En los próximos meses, se llevarán a cabo diferentes proyectos que transformarán el paisaje urbano y convertirán a Barcelona en un lugar más sostenible y habitable.
Barcelona aporta espacio verde con 71 actuaciones y 150 millones de euros
La ciudad de Barcelona se prepara para ganar 22,3 hectáreas de espacio verde gracias a 71 actuaciones que adaptarán la ciudad a los efectos del cambio climático y recuperarán aquellos lugares que estén abandonados o en desuso.
El Programa d'Espais de Proximitat i Interiors (PEPI) se enmarca en el Pla Clima del consistorio y tiene como objetivo principal mitigar las consecuencias de la crisis climática y mejorar la calidad de la superficie pública. Entre las actuaciones destacadas se encuentran la remodelación de 60 paredes con medianeras, la implementación de 216 espacios de sombra y la instalación de espacios verdes en algunas cubiertas.
En total, se realizarán 357 actuaciones con una inversión de 150 millones de euros para aumentar la calidad de la superficie pública y garantizar la salud de la ciudadanía.
Un proyecto para dignificar la ciudad
El alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, ha destacado la importancia de este proyecto, calificándolo como una línea de actuación muy importante que afectará directamente a muchos ciudadanos. El edil ha destacado que la transformación comportará que espacios que actualmente pasan desapercibidos y no son utilizados vuelvan a ser ciudad.
La teniente de alcaldía, Laia Bonet, ha calificado el plan como un proyecto para dignificar la ciudad, resaltando la importancia de recuperar espacios urbanos abandonados y devolverles su función original.
Con este ambicioso proyecto, la ciudad de Barcelona busca adaptarse a los efectos del cambio climático y mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos. La inversión de 150 millones de euros es una muestra del compromiso del consistorio con la sostenibilidad y el bienestar de la ciudadanía.
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