En el mundo de los automóviles, siempre es emocionante descubrir modelos nuevos que intentan revolucionar el mercado. Y, en este caso, Lancia se atreve a lanzar un desafío directo al Mini, un icono en el segmento de los utilitarios. El nuevo Lancia Ypsilon es el modelo que se enfrenta a este reto, y nuestra redacción ha tenido el placer de probarlo en carretera. En las siguientes líneas, te contamos nuestra experiencia al volante de este nuevo utilitario, que promete sorprender a más de uno con sus características y prestaciones.
- Conducimos el nuevo Lancia Ypsilon, el utilitario que se atreve a desafiar al Mini
- Un diseño brillante
- Un utilitario de lujo
- Presentación interior sofisticada
- Detalles exclusivos
- Digitalización y asistente multimedia
- Comportamiento en carretera
- Versión eléctrica y microhíbrida
- Precios y disponibilidad
Conducimos el nuevo Lancia Ypsilon, el utilitario que se atreve a desafiar al Mini
La marca italiana se juega buena parte de su relanzamiento con el nuevo Ypsilon, un modelo que busca diferenciarse de la competencia y llevar la etiqueta de Premium.
Según Luca Napolitano, CEO de Lancia, no nos han sometido a ningún tipo de presión. Tampoco a conseguir grandes objetivos de ventas. Solo nos han dicho que hagamos las cosas bien y creo que el Ypsilon es una buena muestra de ello.
Un diseño brillante
La zaga es especialmente brillante en su diseño, con ópticas redondeadas y elaboradas grafías que incluye. El ejecutivo italiano no anda desencaminado con estas declaraciones. La verdad es que el Ypsilon de nueva generación nos ha parecido un producto con un desarrollo y una puesta en escena que pueden darle muchas alegrías a la renacida marca italiana.
Un utilitario de lujo
El Ypsilon se quiere colgar la etiqueta de Premium, al igual que la marca en general. Nada que objetar, pues las hechuras que muestra y los detalles tan exclusivos que se multiplican tanto por dentro como por fuera dan fe de ello.
Presentación interior sofisticada
La presentación interior es bastante sofisticada con dos grandes pantallas digitales y un elevado nivel de digitalización. La imagen trasera, por ejemplo, es protagonista al estar rematada con unos pilotos redondos de leds que nos trasladan enseguida a la imagen que en su día lució el añorado Stratos.
Detalles exclusivos
Lancias aporta su granito de arena para imprimir el sello de la casa y la personalización necesaria en estas lides. Una prueba es la mesita de café que aparece en la consola central (con un lugar en el fondo para cargar de forma inalámbrica el teléfono) que por sí sola es capaz de llamar la atención.
Digitalización y asistente multimedia
La digitalización ha sido objeto de todo tipo de atenciones. Monta dos generosas pantallas digitales poco extendidas en su categoría (con 20 pulgadas de tamaño en su conjunto) más un asistente multimedia denominado S.A.L.A. (Sound Air Light Augmentation) que nos permite hablar con el coche y seleccionar de forma fácil e intuitiva las muchas y variadas funciones disponibles.
Comportamiento en carretera
El Ypsilon no es un utilitario más. En sus 4,08 metros de longitud esconde muchos tesoros que no desaparecen cuando pasamos a evaluar su comportamiento, que es donde realmente se demuestra el garbo.
Versión eléctrica y microhíbrida
El Ypsilon arranca esta primera e importante fase con dos posibilidades. La más ambiciosa es la eléctrica que, aprovechando el nutrido armario que Stellantis tiene en este capítulo, emplea la unidad de 115 Kw/156 CV de potencia combinada con una batería de 51 kWh sustentadas ambas en la plataforma CMP del grupo.
Precios y disponibilidad
Disponible en principio con tres niveles de acabado (Ypsilon, LX y una serie especial de lanzamiento que en Italia denominan edición Cassina como tributo a este especialista de muebles local) los precios deberían estar en el entorno de los 25.000 euros para la opción de gasolina (sin incluir los más que probables descuentos) y de 40.000 en la de la eléctrica con el equipamiento tope de gama.
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