En un impactante hallazgo, autoridades aduaneras han desvelado un sorprendente caso de tráfico ilícito en la ciudad de Tarragona. Se ha descubierto un cargamento de 16 toneladas de pellet que, para asombro de muchos, estaba contaminado con cocaína. Este suceso ha causado conmoción en la comunidad local y ha generado preocupación por la seguridad y el control de fronteras en la región. La magnitud del hallazgo y la presencia de sustancias prohibidas en un material aparentemente inofensivo han levantado interrogantes sobre la efectividad de los mecanismos de vigilancia en el puerto. Las autoridades se encuentran trabajando arduamente para esclarecer los detalles de este perturbador episodio y garantizar la integridad de la ciudadanía.
Desmantelado centro de procesamiento de drogas en Reus con toneladas de cocaína
En una operación conjunta llevada a cabo en Reus (Tarragona), la Policía Nacional y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han logrado intervenir 16 toneladas de pellet impregnados con cocaína. Además, se ha desarticulado un centro de procesamiento de drogas sintéticas y se ha procedido a la detención de cinco personas.
Los detenidos, de origen albanés, holandés y lituano, se dedicaban al tráfico de drogas a gran escala mediante el uso de contenedores marítimos cargados de pellet procedentes de países del continente americano. La organización criminal operaba en dos naves industriales independientes en Reus, destinadas a diferentes fases del proceso ilegal.
En los registros realizados durante la operación policial, se han incautado más de 5 kilos de drogas sintéticas, casi 4.000 euros en efectivo, dos prensas hidráulicas, material para la elaboración de estupefacientes, un camión y un vehículo de alta gama.
Detenidas cinco personas en operación policial por tráfico de cocaína en Tarragona
La investigación que condujo a estas detenciones se inició el año pasado, cuando las autoridades tuvieron conocimiento de una organización criminal dedicada al tráfico de drogas a gran escala en España. Los miembros de la organización utilizaban métodos sofisticados para introducir la droga a través de los puertos españoles, camuflándola en distintos materiales.
El seguimiento de un cargamento sospechoso de pellet que fue almacenado en una nave en Reus permitió a la policía desplegar un control constante sobre la instalación. Finalmente, la llegada de un camión para cargar el pellet fue el detonante que permitió la intervención policial y la incautación de 16 toneladas de cocaína impregnada en pellet, distribuidas en 920 sacos de 18 kilos cada uno.
Además, se realizaron registros en viviendas de los principales investigados en Tarragona y Marbella, donde se encontraron evidencias relevantes para el caso.
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