En un avance médico revolucionario, un equipo de científicos ha logrado hacer que la piel de ratones vivos sea completamente transparente mediante el uso de un colorante especial. Este descubrimiento innovador abre las puertas a la posibilidad de desarrollar tratamientos no invasivos para una variedad de condiciones médicas, permitiendo a los médicos visualizar en tiempo real el funcionamiento interno del cuerpo sin necesidad de cirugía. La pregunta que surge es si este futuro prometedor también podrá ser aplicado a la humanidad, lo que podría revolucionar la forma en que se abordan las enfermedades y se salvan vidas.
- Descubrimiento revolucionario: científicos logran hacer transparente la piel de ratones vivos
- La técnica innovadora que podría cambiar la medicina: hacer transparente la piel de los ratones
- Un paso importante en la medicina no invasiva: científicos logran hacer transparente la piel de los ratones
- La piel transparente: ¿el futuro de la medicina humana?
Descubrimiento revolucionario: científicos logran hacer transparente la piel de ratones vivos
Un equipo de investigadores de la Universidad de Stanford (EEUU) ha logrado desarrollar una técnica innovadora que permite hacer transparente la piel de ratones vivos de forma reversible en solo 20 minutos. La fórmula se basa en agua mezclada con un colorante alimentario común, la tartracina, empleado en multitud de alimentos y comestibles, como los populares Doritos.
La técnica innovadora que podría cambiar la medicina: hacer transparente la piel de los ratones
Según los autores, que han publicado su trabajo en la revista Science, esta tecnología podría hacer más visibles las venas para la extracción de sangre o ayudar en la detección precoz y el tratamiento del cáncer. Pero, ¿qué aplicaciones prácticas podría llegar a tener este avance en la medicina humana? ¿Tendría efectos colaterales para la salud?
El investigador del Instituto de Óptica 'Daza de Valdés' del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IO-CSIC), Martín López García, explica que tiene muchísimo potencial porque los resultados son espectaculares. Y es que los investigadores han usado moléculas ya disponibles, son de uso normal y, además, no parecen muy tóxicas porque ya las usamos como colorante en la comida.
Un paso importante en la medicina no invasiva: científicos logran hacer transparente la piel de los ratones
Se ve clarísimo que en tejidos relativamente superficiales y sencillos a nivel óptico se pueden hacer transparentes de una manera super evidente. De cara a aplicaciones más biomédicas, no parece que haya una razón evidente por la que no sería aplicable también en piel humana, afirma López García.
La base para entender este avance se halla en el índice de refracción de la luz, que cambia su velocidad y proyección cuando pasa de un medio a otro. Cuando vemos el vidrio de una ventana, lo vemos transparente porque la luz está pasando más o menos recto, no encuentra ningún centro de difusión. Sin embargo, cualquier sistema biológico está compuesto por tantos materiales diferentes con muchas estructuras pequeñas que redireccionan la luz que, cuando cuando intentamos ver a través, al otro lado de la piel en este caso, se ha redireccionado tantas veces que ya no llega nada, expone López García.
La piel transparente: ¿el futuro de la medicina humana?
Un equipo de científicos ha conseguido volver transparente la piel de ratones vivos al aplicarles de manera tópica un colorante alimentario común, utilizado en aperitivos como los Doritos. La técnica se basa en la compensación del índice de refracción de la luz, lo que permite ver lo que hay debajo de la piel de los ratones.
Los investigadores han empleado la tartracina para modificar el índice de refracción de manera que se iguale y, así, la luz ya no es redireccionada sino que pasa a través de la piel de los ratones y permite ver lo que hay debajo.
La investigadora del Instituto de Investigación Sanitaria Gregorio Marañón, María Victoria Gómez Gaviro, considera que la nueva técnica para transparentar la piel de los ratones es muy innovadora y original por emplear un colorante alimentario para hacer transparente la piel en animales vivos, lo cual tiene muchas ventajas a nivel laboratorio porque evita procedimientos más invasivos al crear una ventana óptica en el cuerpo del animal a través de la piel para ver músculos o vasculatura sin tener que seccionarla.
Cabe recordar que el mayor muro en las investigaciones se encuentra en el paso de ratones a humanos porque los controles en humanos son muy estrictos. En la posible futura aplicación en humanos, habría que estudiar los posibles efectos colaterales de esta técnica.
La tartracina ya ha pasado controles como colorante alimenticio, por lo que, al menos, no es dañino para el tracto digestivo de acuerdo a los estándares del ámbito alimentario. Esto es un avance, pero a nivel tópico tendrán que estudiar si esa molécula es tóxica o no, anota López García.
La también responsable del grupo de Bióptica del laboratorio de Imagen Médica de citado hospital madrileño, considera que con esta técnica quizá se podrían llegar a visualizar tumores, pero muy superficiales o en la piel, y no más profundos porque el organismo es muy complejo y tiene muchas capas de tejidos.
José Luis Fernández Luna, jefe de grupo en el Instituto de Investigación Valdecilla (Idival), coincide con ella y señala que la piel humana es más gruesa que la del ratón, por lo que habrá que ver si lo que se ha apreciado en ratones sirve también para humanos.
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