El actor surcoreano Yoo Ah-in recibe condena de un año de prisión por consumo de drogas

El actor surcoreano Yoo Ah-in recibe condena de un año de prisión por consumo de drogas

En un golpe contundente para la industria del entretenimiento surcoreana, el actor popular Yoo Ah-in ha recibido una condena de un año de prisión por su participación en el consumo de drogas. La sentencia, emitida por un tribunal de Seúl, surge después de que se descubriera que el actor había consumido marihuana y propofol, una sustancia controlada, en varias ocasiones en 2021. La noticia ha generado un gran revuelo en la opinión pública surcoreana, ya que Yoo Ah-in es considerado uno de los actores más destacados de la industria del entretenimiento del país. La condena ha generado un debate sobre la lucha contra las drogas en Corea del Sur y las consecuencias para los famosos que se involucran en este tipo de actividades.

Condena a un año de prisión para el actor surcoreano Yoo Ahin por consumo de drogas

El actor surcoreano Yoo Ah-in, conocido por sus papeles en Burning y Hellbound (Rumbo al infierno), fue condenado este martes a un año de prisión por consumo habitual de drogas.

La Fiscalía, que pedía para él cuatro años de reclusión, lo acusaba, entre otras cosas, de consumir propofol, un anestésico usado en procedimientos médicos, de manera ilegal en más de 180 ocasiones entre 2020 y 2022. También sostenía que el intérprete de 38 años compró más de mil pastillas para dormir usando recetas médicas prescritas a otras personas, o que consumió marihuana durante una estancia en EEUU.

Las leyes sobre estupefacientes en Corea del Sur son draconianas, e incluso castigan su consumo cuando se produce fuera del territorio nacional.

Además de la pena de cárcel, el tribunal condenó al actor a pagar una multa de 2 millones de wones (unos 1.490 dólares).

El tribunal del Distrito Central de Seúl que lo condenó subrayó su dependencia de todas estas sustancias y consideró que muy probable que vuelva a consumir drogas si queda en libertad.

En vistas previas, Yoo, cuyo verdadero nombre es Uhm Hong-sik, había asegurado que sufría de depresión, ansiedad e insomnio debido a la presión que sentía por ser una celebridad en su país.

La sentencia es un duro golpe para la carrera del actor, quien había alcanzado gran popularidad en Corea del Sur y en el extranjero gracias a sus destacadas actuaciones en películas y series de televisión.

La condena de Yoo Ah-in es un recordatorio de la severidad con la que se tratan los casos de drogas en Corea del Sur, donde la posesión y el consumo de sustancias ilícitas están penalizados con severas penas de prisión y multas.

El caso de Yoo Ah-in ha generado un gran impacto en la industria del entretenimiento surcoreana, donde se ha condenado la conducta del actor y se han expresado palabras de apoyo para su rehabilitación y recuperación.