- El caso de los 'crios vampiros': la extraña sepultura de los niños con piedras y candados para evitar su regreso a la vida
- Descubren la extraña tumba de dos niños 'vampiros' en un palacio episcopal polaco
- Un entierro con la cara presionada contra el suelo
- Signos de prácticas antivampíricas
- La zona de Chelm, un centro religioso y administrativo
- Otro caso de niño vampiro en Pień, Polonia
El caso de los 'crios vampiros': la extraña sepultura de los niños con piedras y candados para evitar su regreso a la vida
En el siglo XVIII, en la región de Venecia, Italia, se descubrió una extraña práctica funeraria que llamó la atención de los historiadores y expertos en antropología. Se trataba de la sepultura de niños, conocidos como los crios vampiros, que eran enterrados con piedras y candados en sus tumbas. Esta práctica, aparentemente inusual y macabra, tenía un propósito muy específico: evitar que los pequeños regresaran a la vida. En este artículo, exploraremos el misterioso caso de los crios vampiros y las teorías que rodean esta práctica funeraria inusual.
Descubren la extraña tumba de dos niños 'vampiros' en un palacio episcopal polaco
En el marco de unas obras de renovación en los jardines de un antiguo palacio episcopal en Chelm, en la región polaca de Lublin, los obreros han encontrado los restos de dos niños que vivieron y murieron en el siglo XIII. Sin embargo, no se trata de una tumba normal, ya que uno de los niños ha sido enterrado como si de un vampiro se tratase.
El niño en cuestión había sido enterrado con la cabeza separada del cuerpo y el cráneo boca abajo. Además, se habían colocado varias pesadas piedras sobre su torso. Según los expertos, se trataba de un caso de lo que en esa época se llamaba niño vampiro. Los lugareños creían que al enterrarlo boca abajo, el posible vampiro dejaría de representar una amenaza al morder el suelo.
Un entierro con la cara presionada contra el suelo
Un entierro con la cara presionada contra el suelo, con la cabeza cortada o con piedras sobre el cuerpo son algunos de los métodos de enterramiento que se empleaban en el pasado para evitar que una persona considerada una entidad demoníaca saliera de la tumba, ha explicado Paweł Wira, Conservador Provincial de Monumentos de Lublin.
Además, los clérigos del antiguo palacio episcopal habían clavado dos postes, uno orientado al este y otro al oeste. Al parecer, de ese modo conocían la ubicación del entierro y podían detectar una posible reanimación.
Signos de prácticas antivampíricas
Según el arqueólogo Stanisław Gołub, estas medidas tenían como objetivo impedir que los muertos volvieran a la vida como espíritus malignos o vampiros. El entierro muestra claramente signos de prácticas antivampíricas, cuyo objetivo era impedir que los muertos resucitaran, ha explicado el experto.
Ahora, los arqueólogos planean realizar una serie de pruebas en los dos esqueletos para poder determinar la edad que tenían los dos niños cuando murieron. Creen que es probable que no sean los únicos enterrados en el lugar.
La zona de Chelm, un centro religioso y administrativo
La zona de Chelm, centro religioso y administrativo durante la Edad Media, albergaba fortificaciones y edificios religiosos, pero no tenía ningún cementerio conocido. La presencia de estas tumbas plantea la pregunta de si alguna vez existió allí un cementerio no documentado.
Hoy en día, los arqueólogos han descubierto que la práctica de enterrar de esta manera a las personas sospechosas no fue tan infrecuente durante siglos. Se hacía en el siglo XIII, Alta Edad Media, pero también en el XVII, particularmente en Europa del Este, donde prevalecía el folclore sobre vampiros y cadáveres reanimados.
Otro caso de niño vampiro en Pień, Polonia
Cerca de Chelm, también en Polonia, está Pień. Allí, en agosto de 2023, se extrajo el cadáver de un niño de 5 o 6 años que también había sido enterrado boca abajo. En este caso fue en el siglo XVII.
El niño fue enterrado con un candado, cuenta Science Alert. Según los arqueólogos, se trató de una medida más adoptada por los aldeanos para que ese vampiro o esa entidad demoníaca no regresara de entre los muertos.
Además, sobre la tumba apareció un conjunto de esqueletos de varios niños. También, un fragmento de la mandíbula de uno de ellos teñida de verde. Los investigadores, liderados por Dariusz Polinski, creen que ese color podría ser resultado de un tratamiento del dolor y la fiebre con terapia de suspensión de oro.
En ese mismo cementerio, en 2022, se hallaron los restos de una mujer vampiro. Había sido enterrada con un candado en el dedo gordo del pie y una hoz en el cuello (el mecanismo le cortaría la cabeza si intentaba resucitar).
Las prácticas antivampíricas en la Edad Media
Estos hallazgos demuestran que la creencia en vampiros y entidades demoníacas era muy fuerte en la Edad Media, y que la gente estaba dispuesta a tomar medidas extremas para evitar que los muertos regresaran a la vida.
Los arqueólogos continúan investigando estos casos y buscan más información sobre las prácticas antivampíricas en la Edad Media.
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