El disfraz más húmedo: ¿Qué ocultan las toallitas húmedas?

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El disfraz más húmedo: ¿Qué ocultan las toallitas húmedas?

En un mundo donde la higiene personal es fundamental para nuestra salud y bienestar, los productos de cuidado personal parecen ser cada vez más prácticos y cómodos. Sin embargo, detrás de la aparente inocuidad de las toallitas húmedas, se esconde una realidad que puede poner en riesgo nuestra salud. Estos productos, que se han convertido en una parte integral de nuestra rutina diaria, pueden contener químicos peligrosos y sustancias tóxicas que afectan negativamente nuestra piel y nuestro medio ambiente. En este artículo, nos adentramos en el mundo oscuro de las toallitas húmedas y descubrimos qué ocultan realmente estas aparentemente inocentes toallitas.

La verdad detrás de las toallitas húmedas: ¿qué ocultan sus 'calorosos' secretos?

La limpieza personal después de la evacuación siempre ha sido una preocupación para los seres humanos. Desde los ricos emperadores chinos que la practicaban en el siglo VI, hasta la invención del rollo de papel higiénico de los hermanos Scott, Irvin y Clarence en 1880, la sociedad ha buscado formas de mantener la higiene íntima. Sin embargo, la sociedad estadounidense era tan puritana que los inventores tuvieron que disfrazar la autoría de su invento.

El disfraz más húmedo: ¿cómo las toallitas contaminan nuestro medio ambiente?

El disfraz más húmedo: ¿cómo las toallitas contaminan nuestro medio ambiente?

Con el paso del tiempo, se inventaron las toallitas húmedas, que aparentemente inofensivas, con un olor agradable y presentadas con maravillosas cualidades en los recipientes que las contienen, han acabado originando un grave problema ambiental. De hecho, las toallitas se han convertido en el tercer residuo más común encontrado en espacios naturales, especialmente en los ligados a cursos fluviales. Los ríos son sus principales víctimas.

Las toallitas húmedas lanzadas a los inodoros conllevan una fuerte contaminación bacteriológica, lo que causa estragos al medioambiente. En las plantas depuradoras de agua en las ciudades, deben doblar sus trabajos y sacar toneladas de basura inútil; causan unos sobrecostes a la ciudadanía que no son necesarios.

Las toallitas húmedas, un 'disfraz' de limpieza que en realidad ensucia el planeta

Las toallitas húmedas tienen una vida efímera en su función limpiadora, no se pueden reciclar. Además, lo de que son biodegradables no es verdad. Según Zero Waste Europe, su proceso de fabricación implica el uso de una gran cantidad de materiales, agua y energía y deja tras de sí una importante huella de carbono.

Incluso algunas empresas famosas que fabrican y comercializan papel higiénico han llamado la atención sobre el efecto contaminante de las toallitas. En algunos países como Reino Unido se estudia su prohibición total. A pesar de que se ha hablado sobre el asunto contaminante, su uso no para de crecer.

El misterio de las toallitas húmedas: ¿qué ocultan sus 'placenteros' envoltorios?

Parece que los fabricantes gordos se han lanzado a la nueva colonización de África y Asia. La especie humana, como colectivo complejo, es tremendamente contradictoria: se beneficia de algo que potencialmente la va a causar daño, y le va a costar dinero. No sabe desprender a su vida de los sobrecostes personales y colectivos que provocan los llamamientos a ciertos consumos.

El mal uso de las toallitas húmedas en España cuesta entre 4 y 6 euros por persona cada año. Imaginemos en este momento: muchos más usos y más población usuaria.

En consecuencia, nos preguntamos de cara al famoso año 2030: ¿habrá toallitas húmedas en el mercado? Por ahora, muchas. Hemos hecho un sondeo visual en dos supermercados grandes y hemos localizado 18 presentaciones de estas toallitas, incluidas las destinadas a los bebés.

Mejor, si se nos permite la osadía, declaremos el boicot a esas cosas cuyos disfraces –coloristas y presentados como placenteros- ocultan las mentiras de la balanza que mide la mejora de la vida colectiva.

Así pues, resumiendo: como mal menor, si nos vemos obligados a usarlas, no parece mala idea la de colocar un pequeño contenedor en los baños y arrojarlas allí para después enviarlas con la basura general, tal como promueven muchas organizaciones ecologistas y sociales.

Susana Vidal

Soy Susana, redactora de la página web Diario Online, un periódico independiente de actualidad nacional española. Mi pasión por la escritura y la veracidad de la información me lleva a investigar a fondo cada noticia que publicamos. Con un enfoque objetivo y crítico, me esfuerzo por ofrecer a nuestros lectores contenidos relevantes y de calidad. Mi compromiso es mantener informada a la sociedad española, abordando temas de interés público con profesionalismo y ética periodística. ¡Gracias por seguirnos en nuestra plataforma digital!

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