El héroe anónimo: Rafael Casanovas, el desconocido que inspira la tradicional ofrenda floral en la Diada de Cataluña.

El héroe anónimo: Rafael Casanovas, el desconocido que inspira la tradicional ofrenda floral en la Diada de Cataluña.

En el marco de la Diada de Cataluña, una de las fechas más significativas para la identidad catalana, se conmemora un acto de gran valor y sacrificio que ha pasado desapercibido durante décadas. Rafael Casanovas, un héroe anónimo, es el protagonista de una historia emocionante que ha inspirado la tradicional ofrenda floral que se lleva a cabo cada 11 de septiembre en la región catalana. A través de esta noticia, conoceremos la vida y legado de este personaje poco conocido, pero clave en la historia de Cataluña, y cómo su acción heroica sigue siendo un ejemplo para las generaciones futuras.

El héroe anónimo: Rafael Casanovas, el símbolo de la lucha por la independencia y la identidad catalana

En el marco de la Diada Nacional de Cataluña, que se celebra cada 11 de septiembre, se conmemora la derrota de 1714 en la Guerra de Sucesión. Esta fecha tiene un gran significado para los catalanes, ya que recuerda la defensa de la ciudad de Barcelona cuando cayó en manos de las tropas de Felipe V.

En el centro de estas conmemoraciones se encuentra Rafael Casanova, una figura histórica que, con el paso del tiempo, se ha convertido en un símbolo de la resistencia y del sentimiento catalanista. Fue un destacado jurista y político español, conocido por su firme apoyo a Carlos de Austria durante la Guerra de Sucesión.

Casanova llegó a ser el último Conseller en Cap (consejero en jefe) de Barcelona, el máximo cargo de la ciudad durante los últimos días del asedio borbónico. Después de más de un año de asedio, las tropas de Felipe V lograron tomar Barcelona el 11 de septiembre de 1714. Rafael Casanova resultó herido en los combates finales y fue exonerado de sus cargos políticos y militares gracias a un perdón real.

Un patriota y defensor de las libertades catalanas

A pesar de su exoneración, la valentía y el simbolismo de su defensa convirtieron a Casanova en una figura destacada para el catalanismo emergente, que lo comenzó a considerar uno de sus grandes patriotas y defensores de las libertades catalanas. A lo largo del tiempo, la figura de Casanova ha sido objeto de distintas interpretaciones.

Mientras que para muchos es un símbolo de la lucha por la autonomía de Cataluña, otros lo ven como un defensor de los intereses de la Casa de Austria y no como un precursor del nacionalismo catalán moderno. Aun así, su legado ha sido reivindicado por el catalanismo, especialmente desde el siglo XIX.

La estatua de Rafael Casanova, un punto central de la Diada Nacional de Cataluña

Barcelona le dedicó una calle en 1863 y en 1888 se erigió una estatua en su memoria, la cual se ha convertido en un punto central de los homenajes durante la Diada. Durante los periodos de las dictaduras de Primo de Rivera y Franco, los homenajes a Rafael Casanova fueron prohibidos. La estatua de Casanova fue retirada y sus homenajes suprimidos, lo que reflejaba la censura de cualquier expresión del catalanismo.

No fue hasta 1977 que el monumento fue restituido y volvió a ser escenario de los homenajes florales de las principales instituciones y asociaciones catalanas durante la Diada Nacional de Catalunya. Hoy en día, la estatua de Rafael Casanova se cubre de flores cada 11 de septiembre, un gesto de recuerdo y reconocimiento.

Para muchos catalanes, Casanova simboliza la lucha por la identidad, la resistencia y la libertad, valores que aún resuenan en el contexto actual de Cataluña. En este sentido, la figura de Rafael Casanova es un recordatorio de la importancia de luchar por la independencia y la identidad catalana.