El Parador de [Lugar] es declarado el mejor hotel de España ubicado en un entorno natural, destacando su armonía con la naturaleza y servicios de alta calidad
Es con gran satisfacción que se anuncia que El Parador de [Lugar] ha sido galardonado como el mejor hotel de España ubicado en un entorno natural. Este reconocimiento es un tributo a la armonía perfecta que se ha logrado entre la arquitectura del hotel y el paisaje natural que lo rodea. La calidad excepcional de sus servicios y la atención personalizada brindada a los huéspedes han sido clave para obtener este prestigioso premio. Ubicado en el corazón de [Lugar], este hotel ofrece una experiencia única de alojamiento, combina la tranquilidad del entorno natural con la comodidad y el lujo.
El Parador Costa da Morte, el mejor hotel natural de España, según National Geographic
El Parador Costa da Morte, ubicado en Muxía, A Coruña, ha sido elegido como el mejor hotel en entorno natural de España por los lectores de la revista National Geographic. Este reconocimiento se debe a su innovación y excelencia en el servicio de un alojamiento que abrió sus puertas por primera vez el 25 de junio de 2020.
Naturaleza para los sentidos
El Parador de Costa da Morte se ha incluido en el programa Naturaleza para los sentidos, un proyecto de ecoturismo sostenible y responsable para generar beneficios sociales, ambientales y económicos en la zona. Los clientes podrán disfrutar de rutas a caballo y en bicicleta bordeando la costa o conociendo los pueblos cercanos; montar en kayak para ver la cascada del Ézaro o en barco hasta el Cabo de Fisterra para contemplar la última puesta de sol de la Europa continental.
Además, los visitantes pueden conocer de primera mano la cultura y tradiciones de la zona como el arte de las palilleiras o los secadores de congrio; sentirse marinero por un día visitando el puerto y asistiendo a una subasta de pescado y marisco en la lonja de Laxe, realizar una travesía por la Ría de Muros y visitar una batea de mejillones, conocer la historia de Fisterra y sus naufragios, así como las influencias de la cultura celta en esta zona de Galicia, entre otras muchas experiencias.
Un refugio en la naturaleza
El Parador de Costa da Morte es un refugio en la naturaleza, ubicado en un entorno privilegiado junto a la bella Praia de Lourido. El edificio se mimetiza con el paisaje, con cubiertas vegetales escalonadas siguiendo la inclinación de la ladera del Monte de Lourido. Su forma escalonada se adapta al desnivel del terreno, integrándose en la orografía.
Para salvar la pendiente del terreno se instalaron dos ascensores panorámicos que se mueven en sentido diagonal. Cuenta con una superficie habitable de 15.000 m2 y 63 habitaciones todas ellas con terraza y vistas a la playa de Lourido. También dispone de un spa, un espacio de relax que mira al Atlántico, así como una piscina infinity pool con muro final de cristal con vistas a la playa de Lourido.
La Costa da Morte, un destino único
La Costa da Morte, ubicada en el noroeste del litoral gallego, se extiende a lo largo de docenas de kilómetros dentro de la provincia de A Coruña. Este tramo costero es famoso por sus playas desiertas, ensenadas y acantilados impresionantes. Los cabos de Fisterra, Touriñán y Vilán se adentran en un océano bravío y de aguas agitadas, formando un paisaje inconfundible que se ha convertido en un emblema de la región.
El visitante encontrará en sus aldeas un ambiente ideal para pasear tranquilamente y observar las labores de los pescadores y mariscadores locales. La Costa da Morte es una tierra impregnada de misterio, leyendas y mitos, que junto con su belleza natural y valor cultural, la hacen un destino único y especialmente encantador.
Este área alberga importantes espacios naturales, como los Lugares de Importancia Comunitaria y la Zona de Especial Protección para las Aves de las Illas Sisargas, así como el Paisaje Protegido de los Penedos de Pasarela e Traba. La singularidad de la Costa da Morte se acentúa por su ubicación como el límite occidental de Europa, un lugar que los antiguos romanos consideraban el Finisterrae, o el fin del mundo, donde el sol se sumerge en el Atlántico, dejando una imagen imborrable en la historia.
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