El presidente del Gobierno niega cualquier irregularidad en la vida laboral de su esposa y critica a la oposición por tratar de desviar la atención de los verdaderos problemas del país
En un comunicado emitido en la mañana de hoy, el presidente del Gobierno se refirió a las recientes acusaciones en contra de su esposa, negando categóricamente cualquier tipo de irregularidad en su vida laboral. El jefe del Ejecutivo considera que estas acusaciones no son más que una maniobra política por parte de la oposición para desviar la atención de los verdaderos problemas que enfrenta el país. Según el presidente, la oposición busca generar confusión y ruido en lugar de centrarse en los temas que realmente importan para la ciudadanía.
Sánchez niega irregularidades en vida laboral de su esposa y acusa a la oposición de 'fabular'
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció este miércoles para hacer balance del curso político y responder a las preguntas de los periodistas sobre las actividades profesionales de su esposa, Begoña Gómez.
Sánchez no proporcionó detalles sobre las reuniones de su esposa en Moncloa, ni confirmó o negó si tuvo conocimiento de ellas o si estuvo presente en algunas de ellas. En lugar de eso, afirmó que ya había dado todas las explicaciones en el Congreso.
El presidente del Gobierno acusó a la oposición de dedicarse a fabular y a inventarse un no caso. Este es un no caso que viene de la frustración e impotencia de la oposición, que ha renunciado a la batalla política de las ideas. Tenemos un Gobierno que gobierna y una oposición que fabula, manifestó el jefe del Ejecutivo.
Los periodistas le preguntaron a Sánchez sobre las reuniones que mantuvo su esposa con el empresario Carlos Barrabés y con el rector de la Universidad Complutense de Madrid, Joaquín Goyache, ambos imputados en la misma causa que Gómez. También le preguntaron si supo de las declaraciones de interés que firmó su esposa para empresas que participaban en concursos públicos.
Sánchez no respondió a estas preguntas, sino que insistió en que ya había dado explicaciones políticas suficientes en el Congreso.
En cambio, el presidente sí habló sobre la querella que ha presentado contra el juez Juan Carlos Peinado por presunta prevaricación al citarle en Moncloa para declarar como testigo. También habló sobre el hecho de que el escrito lo firme la Abogacía del Estado.
La querella busca defender la dignidad de la institución de la Presidencia y los derechos reconocidos nada más y nada menos que desde 1886, según Sánchez. El martes, considera, se vivió un montaje y que fue absolutamente patético y bochornoso ver a las asociaciones ultraderechistas pelearse por ver quién entraba a su testifical.
Con todo, Sánchez se mostró convencido de que el tiempo pondrá las cosas en su sitio.
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