Franconación enfrenta un gran desafío: nombrar a un nuevo primer ministro, con opciones y alianzas en juego para alcanzar el cargo

Franconación enfrenta un gran desafío: nombrar a un nuevo primer ministro, con opciones y alianzas en juego para alcanzar el cargo

En un momento crítico para la política de Franconación, el país se enfrenta a un desafío de gran envergadura: nombrar a un nuevo primer ministro que sea capaz de liderar la nación hacia una senda de estabilidad y crecimiento. La dimisión del anterior titular ha generado un vacío de poder que debe ser llenado lo antes posible, y varias figuras políticas se han perfilado como opciones viables para ocupar el cargo. Sin embargo, la complejidad de las alianzas políticas y los intereses en juego harán que el proceso de designación sea cualquier cosa menos sencillo.

Francia en laberinto: ¿quién será el próximo primer ministro?

Francia tiene ya las piezas del puzzle, pero no parece fácil resolverlo. El Nuevo Frente Popular (NFP), la alianza de izquierdas, venció en las legislativas con 182 diputados, a los que se suman 13 independientes de izquierda. El macronismo ha caído hasta la segunda posición, con 168 legisladores. Y el partido ultraderechista Agrupación Nacional ha quedado finalmente tercera, sumando junto a sus aliados 143 escaños.

Macron enfrenta un gran desafío: nombrar a un nuevo primer ministro y formar gobierno

Tras conocerse los resultados, el primer ministro Gabriel Attal anunció que dimitía, pero el presidente Emmanuel Macron ha decidido mantenerle de momento para asegurar la estabilidad. Dure lo que dure Attal, por una cuestión práctica y para evitar lagunas de poder, no está claro quién lo va a reemplazar.

La izquierda gana en Francia, pero Macron no puede gobernar solo: ¿qué opciones quedan?

En Francia no hay precedentes de que ningún partido obtenga una mayoría sin una coalición gobernante obvia. El país entra en territorio ignoto y, si pueden más los egos que la responsabilidad de los líderes de unos y otros partidos, puede entrar en punto muerto.

Macron elige: ¿al que quiere o al que puede?

En teoría, el presidente de la República tiene la facultad de elegir como jefe de Gobierno a quien le parezca. Sin embargo, la lógica institucional no le permite hacer caso omiso de la opinión de la mayoría de los diputados, ya que un gobierno contrario a sus deseos podría ser objeto de una moción de censura.

Raphaël Glucksmann, diputado del Parlamento Europeo, es un perfil que se ajusta a la descripción de un moderado del Partido Socialista. La cohabitación entre él y Macron es imaginable.

François Hollande, expresidente de Francia, también ha sido mencionado como posible candidato a primer ministro. Es un hombre moderado y de Estado.

Tres escenarios posibles

Un gobierno en coalición

Los partidos podrían sentarse a discutir cómo formar una coalición que pudiera reunir a más de la mitad de los diputados tras el nombre de un candidato a primer ministro. A ello adjuntarían un contrato de Gobierno que marcara el itinerario de la legislatura.

Un gobierno en minoría

El Ejecutivo de un primer ministro en minoría viviría bajo la amenaza de un voto de censura en la Asamblea Nacional. Claro que ya han existido gobiernos en minoría.

Un gobierno técnico

Se trataría de nombrar ministros sin filiación conocida para una gestión de mínimos y sin grandes proyectos, muy a la italiana. Un gobierno poco ambicioso pero práctico.

¿Duraría? Las presidenciales son en 2027 y para eso queda mucho. Y no, no puede haber nuevas legislativas hasta dentro de un año, como indica la Constitución. ¿Se puede permitir la segunda economía más grande de la Unión Europea y su principal potencia militar el lujo de perder un año y de estrenar legislatura con unos Juegos Olímpicos y más desgobierno que gobierno?