- Funcas descarta rebajar el déficit a un 2,5% el próximo año, ya que no se contempla prórroga de los Presupuestos
- Funcas descarta rebajar déficit a 2,5% sin medidas adicionales
- Un crecimiento del gasto primario del 3,7% y un aumento de los ingresos del 4,4%
- El ajuste de 0,5 puntos de déficit es manejable
- Actuar contra los beneficios fiscales
- El Gobierno busca apoyos para aprobar la senda de estabilidad y deuda pública
Funcas descarta rebajar el déficit a un 2,5% el próximo año, ya que no se contempla prórroga de los Presupuestos
La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) ha emitido un informe en el que se descarta la posibilidad de rebajar el déficit público al 2,5% del Producto Interior Bruto (PIB) en el próximo año. Esta decisión se debe a que no se contempla una prórroga de los Presupuestos actuales, lo que supondría un aumento de la presión fiscal y un freno al crecimiento económico. Según Funcas, la situación actual no permite alcanzar este objetivo, ya que se requiere un ajuste fiscal importante para lograr una reducción significativa del déficit. Esta noticia tiene importantes implicaciones para la economía española y suscitó un gran interés en el sector financiero.
Funcas descarta rebajar déficit a 2,5% sin medidas adicionales
La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) ha advertido que España no podrá situar el déficit público por debajo del 3% el año que viene sin aprobar medidas o ajustes por el lado de los ingresos o por el de los gastos.
Según Funcas, incluso con la mejora generalizada de las previsiones económicas del país, tanto para este como para el próximo ejercicio, el déficit se situará el próximo año en el 3% si no se toman medidas adicionales.
Un crecimiento del gasto primario del 3,7% y un aumento de los ingresos del 4,4%
El 'think tank' ha calculado que con un crecimiento del gasto primario (sin incluir el pago de intereses) del 3,7% y un aumento de los ingresos del 4,4%, que sería el escenario inercial, el déficit se situará el próximo año en el 3%.
Para rebajarlo a ese 2,5% comprometido, el aumento del gasto debería limitarse al 3% y los ingresos deberían elevarse un 4,8%.
El ajuste de 0,5 puntos de déficit es manejable
El director general de Funcas, Carlos Ocaña, ha dejado claro que ese ajuste de 0,5 puntos de déficit es manejable en este momento concreto del tiempo. Como todas las cosas, si se deja para mañana, se complica, ha advertido.
Ocaña ha recordado que el país está en niveles de gasto muy elevados, puesto que se mantienen algunos de los desembolsos extraordinarios que el Ejecutivo tuvo que aprobar a raíz de la pandemia (las medidas anticrisis o el conocido como 'escudo social').
Actuar contra los beneficios fiscales
Ocaña considera que por el lado de los impuestos no hay mucho más margen para subirlos. Ha puesto el ejemplo del IVA, donde España tiene un nivel de tipos similar al de Francia y más alto que el de Alemania, así como un nivel de IRPF parecido al de otras economías del entorno.
Sí que ve margen de mejora, sin embargo, en los beneficios fiscales; en lo que se pierde en términos de recaudación con las bonificaciones o reducciones que existen para distintos grupos de contribuyentes. Hay margen para hacer ese ajuste siendo todo ‘business as usual’, sin que cambien los parámetros, ha apuntado.
El Gobierno busca apoyos para aprobar la senda de estabilidad y deuda pública
El Gobierno inició la pasada semana una nueva ronda de contactos con los grupos parlamentarios. El objetivo es lograr los apoyos suficientes para aprobar la senda de estabilidad y deuda pública -que Junts, PP y Vox tumbaron en el Congreso el pasado mes de julio- y empezar a desatascar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2025.
El motivos es que la Comisión Europea ha dado a España un tiempo 'extra' para remitirle el borrador presupuestario con las medidas concretas que aplicará el año que viene y que tienen que completar necesariamente su plan estructural.
Carlos Ocaña ha considerado que estaría bien tener un plan presupuestario más detallado con o sin la presión de Bruselas a la que, no obstante, ha dado la bienvenida.
Ha reconocido que no será fácil sacar adelante las cuentas del año que viene dada la actual situación política, en la que el Gobierno se está encontrando con dificultades para aprobar sus reformas por las dificultades para conformar una mayoría parlamentaria suficiente.
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