En un intento revolucionario por conectar dos ciudades emblemáticas, se ha instalado un ponte innovador entre Dublín, capital de Irlanda, y Nueva York, ciudad estadounidense emblemática. Esta conexión transatlántica prometía ser un paso gigante hacia adelante en la comunicación y el intercambio cultural entre Europa y América del Norte. Sin embargo, los resultados de este proyecto ambicioso no han sido los esperados, y han generado más preguntas que respuestas. ¿Qué ha salido mal? ¿Cuáles son los verdaderos beneficios de esta conexión? A continuación, exploraremos los detalles de este proyecto y examinaremos los resultados inesperados que han generado un gran interés y debate en la comunidad internacional.
La unión global: Portal conecta Dublín y Nueva York, pero los resultados no son los esperados
Gracias a las nuevas tecnologías, el mundo está más unido que nunca. Poder hablar con otra persona, e incluso verla, independientemente de las distancias, es ya algo de lo más normal. Sin embargo, lo que llama la atención es que cuando este tipo de actos se celebran en plena calle, las cosas se pueden complicar.
Todo comenzó gracias al proyecto del artista lituano Benediktas Gylys. Con su proyecto, Portals, pretende crear una serie de pantallas circulares que unen gracias a una cámara en pleno directo diferentes ciudades. Así, gracias a la conexión, se puede ver lo que están haciendo desde el otro lado de la pantalla.
Los portales son una invitación a conocer gente por encima de fronteras y diferencias y a experimentar nuestro mundo como realmente es: unido y uno, ha explicado el creador. Así, una de ellas está situada en Nueva York, mientras que la segunda se encuentra en Dublín.
El directo proporciona una ventana entre lugares distantes, permitiendo a la gente reunirse fuera de sus círculos sociales y culturas, trascender las fronteras geográficas y abrazar la belleza de la interconexión global, ha explicado Gylys. Aunque, lo que él no esperaba es que la gente usaría la plataforma para hacer cabrear a los del lado contrario.
Así, tras un momento de alegría y unión entre las dos ciudades, rápidamente alguien de Irlanda decidió mostrar una imagen polémica. Entre risas, la pantalla de un móvil apareció en grande mostrando una fotografía del atentado de las torres gemelas el 11 de septiembre.
Además de este portal, también hay otros en diferentes lugares del mundo como Polonia, Lituania, o Brasil. De este modo, la idea es que las conexiones vayan cambiando de país en país.
El proyecto Portals tiene el objetivo de unir a las personas de diferentes partes del mundo, pero parece que la realidad es más complicada de lo esperado. A pesar de esto, el proyecto sigue adelante, con el objetivo de conectar a las personas y promover la comprensión y el diálogo entre culturas.
Deja una respuesta