La ciudad francesa con un casco antiguo amurallado y una de las fortalezas más grandes de Europa.
Recientemente se ha descubierto en Francia una joya arquitectónica que ha dejado perplejos a los expertos en historia y turismo. Se trata de una ciudad con un casco antiguo amurallado que nos transporta a épocas pasadas, donde cada calle es un testimonio vivo de la grandeza de su pasado. Pero lo más impresionante es la presencia imponente de una de las fortalezas más grandes de Europa, que se erige majestuosa y vigilante, recordándonos la importancia estratégica de este lugar en tiempos de antaño. Sin duda, este hallazgo ha despertado el interés de investigadores y viajeros por igual, ansiosos por sumergirse en la historia y el encanto de esta ciudad única.
Fougères: Ciudad medieval con murallas y fortaleza monumental en Bretaña francesa
En el noroeste de Francia se encuentra la región de Bretaña, caracterizada por sus antiguas fortalezas medievales y costas escarpadas. A tan solo 40 minutos en coche de la capital, Rennes, se sitúa Fougères, una ciudad cuyo casco antiguo, con calles adoquinadas y custodiado por un castillo del siglo XII, la convierte en una encantadora ciudad de cuento.
Descubre Fougères: Casco antiguo amurallado y castillo del siglo XII en Francia
Fougères está protegida por un imponente complejo defensivo edificado entre los siglos XI y XV, siendo una de las fortalezas más grandes de Europa, con una extensión de dos hectáreas. Trece torres se erigen a lo largo de una muralla sobre la que se puede caminar para disfrutar de los jardines y los pintorescos tejados del casco antiguo.
La fortaleza la lidera el castillo de Fougères, fundado en el año 1020, que se ubicaba en un cruce de rutas comerciales y desempeñó un papel importante en la defensa del Ducado de Bretaña. Este castillo ha sobrevivido bien a los siglos y su estado de conservación es muy bueno, siendo posible visitarlo por un costo de 10 euros.
La joya de la corona de Fougerès es su fortaleza medieval, pero dentro del casco antiguo se ubican edificios religiosos que elevan su adoquinado centro histórico. Destacan la iglesia de Saint Sulpice, de estilo gótico, y la iglesia de Saint-Léonard, de estilo neogótico, ambas con características arquitectónicas impresionantes.
De la Francia feudal pasamos a la revolución industrial con el barrio de Bonabry, donde se desarrolló la fabricación de calzado en el siglo XIX. Dos antiguas fábricas, testigos de la industria zapatera de la ciudad, se mantienen en pie en este barrio.
Fougères se encuentra a 50 kilómetros de Rennes y a 44 km del conocido Monte Saint-Michel, siendo de fácil acceso en coche o tren desde Rennes. La estación de tren de Fougerès ofrece conexiones a precios accesibles para aquellos que deseen explorar esta encantadora ciudad medieval.
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