Rudy Fernández se despide del WiZink Center con una noche inolvidable
El alero del Real Madrid, Rudy Fernández, vivió una noche emocionante en el WiZink Center, probablemente su último partido oficial en casa con la camiseta merengue.
El balear se despidió con un partidazo individual en el segundo enfrentamiento de la final de la Liga Endesa ante UCAM Murcia, coronado con una ovación de más de un cuarto de hora ante la que no pudo esconder las lágrimas de emoción.
Una actuación individual impresionante
Fernández fue sustituido a falta de cinco minutos para el final del último cuarto tras una gigantesca actuación individual, con 14 puntos y una asistencia.
En ese momento, arrancó la ovación de todo el estadio, que correspondió con un tímido saludo a la grada. Rudy Fernández, lolololoooo, sonaba en un estruendo incesante mientras las cámaras recogían la emoción del hombre que tantas noches hizo soñar a los allí presentes.
Rudy trató de aguantar, pero no le fue posible ante un WiZink a reventar que consiguió arrancarle unas lágrimas de emoción.
El Real Madrid gana el segundo partido de la serie
El Real Madrid también ganó el segundo partido de la serie en casa y tendrá su 'match ball' ante el UCAM en Murcia.
Ya nadie miraba a un partido sentenciado, todo el mundo aplaudía a la leyenda que tampoco esperó al fin del tiempo en la cuenta atrás.
Suyo fue el protagonismo total de una noche en la que hasta Chus Mateo cedió su turno de palabra. También él, emocionado, apenas pudo pronunciar unas pocas palabras de agradecimiento a su jugador, reconocido por la grada también con una placa conmemorativa del momento.
Un momento inolvidable
¡TODO EL MUNDO COREA RUDY FERNÁNDEZ! Fue un increíble momento en el WiZink Center, en el que podría ser el último partido de Rudy Fernández en el pabellón junto a su afición.
Rudy fue el último en abandonar el parqué en su última vez, pues aunque podría regresar en un quinto partido, no parece que el músculo de este Real Madrid permita una remontada de UCAM Murcia en casa.
También es deseo de Rudy, tal y como aclaró en declaraciones a pie de pista, no volver a jugar en casa si la victoria lo permite tras una noche verdaderamente mágica.
Una noche que quedará grabada en la memoria de todos los presentes en el WiZink Center.
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