La epidemia de despidos desata la búsqueda de detectives privados para investigar posibles fraudes laborales

La epidemia de despidos desata la búsqueda de detectives privados para investigar posibles fraudes laborales

En el contexto de la crisis económica actual, la epidemia de despidos que azota al mercado laboral ha generado una creciente demanda de detectives privados especializados en investigaciones laborales. Muchas empresas y particulares buscan contratar estos servicios para investigar posibles fraudes laborales, como despidos improcedentes, discriminación laboral y fraude en la contratación. La situación ha llevado a una auge en la demanda de servicios de investigación privada, que se espera que continúe en aumento en los próximos meses. A continuación, se analizarán las implicaciones de esta tendencia y cómo los detectives privados están ayudando a las víctimas de fraudes laborales a buscar justicia.

Detectives privados en alta demanda para investigar supuestos fraudes laborales

A medida que se gana distancia, no cabe duda que la pandemia generó importantes cambios en el mercado de trabajo, como una gran rotación de los trabajadores más jóvenes o la extensión del teletrabajo. Sin embargo, también ha conllevado efectos adversos como el auge del absentismo y las bajas laborales que centra las preocupaciones de las empresas y al que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones no consigue dar respuesta.

Entre las compañías también han crecido las sospechas de fraude y el recurso a los detectives privados ha pasado a ser habitual, lo que ha disparado la demanda de agencias especializadas en estos casos. La investigación privada es muy efectiva, las empresas lo saben y tienen muy controlado este aumento de las bajas laborales. En el caso de algunos clientes, hay hasta un 30% de la plantilla fuera por incapacidad.

Una herramienta efectiva contra el fraude laboral

César Martín, socio director de Castellana Detectives, explica que cada vez son más las compañías que les contactan para encargarles una serie de investigaciones de trabajadores que sospechan que están cometiendo un fraude, con el objetivo de poder negociar o si se llega a juicio, presentar el informe oportuno con el que demostrar que se trata de un despido procedente por haber actuado con mala fe.

La ley 15/2022 para la igualdad de trato y la no discriminación, introdujo la condición de salud entre los supuestos que cuentan con guarda legal, por lo que si la compañía no consigue demostrar que la razón que ha motivado la decisión del cese ha sido otra o que se ha cometido un fraude con la solicitud (o extensión de la baja) el despido es considerado nulo. Esta calificación obliga a la compañía a readmitir al trabajador, pagar los salarios de tramitación -los correspondientes al período desde que se efectuó el despido hasta la resolución- y la indemnización, si cabe.

Un servicio cada vez más recurrente

Los profesionales consultados relatan que las pruebas de los detectives también han ganado peso en estos procesos y son tenidas en cuenta en la gran mayoría de los casos. Lo que antes era para algunas firmas un servicio esporádico, ahora se ha convertido en algo muy recurrente y cotidiano. En nuestro caso, en dos años hemos pasado de que las investigaciones por bajas laborales sean un 50% de nuestro trabajo a que sean prácticamente el 80%. Hoy en día, de cada 100 investigaciones que hacemos, 80 son de bajas y es porque el índice de absentismo es muy alto, coincide el CEO de Agencia Gran Vía Monopol en Madrid, Pablo Blanco.

El aumento en la demanda de sus servicios también está muy ligado a los cambios en el perfil de las empresas y otros aspectos de la legislación, en los negocios familiares era más frecuente conocer cuál era el origen de la ausencia del trabajador. Estos casos siempre se han investigado, es un servicio histórico de los detectives privados, pero antes el fraude era más visible, la propia empresa detectaba al empleado infractor. Hoy en día hay una sobreprotección de los derechos del trabajador y lo dificulta un poco más, además hay más supuestos en los que el despido puede ser discriminatorio y eso pone a la empresa en una situación de debilidad, aprecia este detective.

Un aumento de la confianza en los servicios de detectives

El responsable de Castellana Detectives también incide en la reducción de los casos fraudulentos que se da en las empresas que logran demostrar un fraude durante al menos un año como otro de los elementos que hacen que las empresas confíen cada vez más en sus servicios. Incluso hay algunos que se dan inmediatamente de alta, comenta. En algunos casos también son los propios trabajadores los que toman un papel activo en la gestión de este problema y denuncian si saben que un compañero está cometiendo un fraude.

En muchas ocasiones son los empleados los que informan a la empresa y más ahora, a través de los canales de denuncia, que son obligatorios desde el año pasado en las empresas de más de 49 empleados, incide Martín. Estos profesionales hacen referencia al sector del transporte o el de la hostelería como los sectores económicos en los que detectan más fraudes, si bien subrayan que no es una práctica exclusiva de estas actividades.

El ámbito de los servicios, el número de horas no trabajadas por incapacidad temporal rozó el 30% del total de no efectuadas, según el último informe de Adecco. El absentismo y las bajas laborales siguen siendo un problema para las empresas, y los detectives privados se han convertido en una herramienta efectiva para combatir el fraude laboral.