En un giro inesperado en el debate sobre la crisis migratoria en el estrecho de Gibraltar, la Guardia Civil ha lanzado un duro revés a la versión oficial, que hasta ahora culpaba a la resistencia de los migrantes de la tensión en la zona. Sin embargo, según fuentes de la institución, la verdadera razón detrás de la situación es la falta de colaboración de la policía marroquí. Esta revelación pone en duda la narrativa oficial y destaca la importancia de una cooperación efectiva entre las autoridades españolas y marroquíes para abordar el problema de la inmigración irregular en la región. A continuación, se analizarán las implicaciones de esta declaración y se explorarán las posibles consecuencias para la política migratoria en la zona.
- La Guardia Civil denuncia la falta de colaboración de la policía marroquí en la lucha contra la inmigración irregular
- Reclaman medidas urgentes para frenar la inmigración irregular
- Discrepancias sobre la colaboración de la policía marroquí
- Reclaman refuerzo de plantillas y mejores condiciones laborales
La Guardia Civil denuncia la falta de colaboración de la policía marroquí en la lucha contra la inmigración irregular
Entre 500 y 700 inmigrantes al día, con picos de hasta 1.500 en una sola jornada, han intentado entrar en Ceuta de forma irregular durante la última semana, una presión migratoria que ha vuelto a poner de manifiesto la falta de medios de la Guardia Civil para hacer frente a esta problemática.
En Canarias, la situación no es muy diferente porque la llegada de cayucos es constante y dibuja un escenario especialmente complicado en la isla de El Hierro, donde el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) se encuentra al límite de su capacidad y la Policía Nacional apenas dispone de efectivos para gestionarlo.
Reclaman medidas urgentes para frenar la inmigración irregular
Y mientras PSOE y PP se enzarzan en disputas sobre la reforma de la ley de extranjería, los sindicatos policiales reclaman medidas urgentes para reforzar plantillas, dotar de más medios materiales a los agentes y, sobre todo, instan al Gobierno a trabajar políticamente para resolver el problema en origen.
En Ceuta siempre hay una situación de calma tensa por la presión migratoria, pero cuando no hay entradas irregulares de inmigrantes es porque la policía marroquí está colaborando, sin embargo, cuando se producen este tipo de asaltos masivos es por todo lo contrario, porque no está colaborando, afirma Eduardo García, portavoz de la Unión de Guardias Civiles (UGC).
Marruecos ha lanzado un nuevo órdago a la administración española, utilizando a personas desesperadas como fichas en este pulso político, ha señalado Mila Cívico, portavoz de la Asociación Profesional Justicia Guardia Civil (JUCIL), quien ha instado al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a viajar de forma urgente a Marruecos para que este país detenga la oleada de migrantes a nado que acceden a Ceuta de forma irregular.
Discrepancias sobre la colaboración de la policía marroquí
Las quejas de los sindicatos contradicen a la delegada del Gobierno en Ceuta, Cristina Pérez, quien agradeció este lunes la labor de la policía de Marruecos. Quiero agradecer a las autoridades marroquíes el trabajo que están desarrollando. No es sencillo afrontar lo que están teniendo en sus costas y, a pesar de ello, su colaboración es importantísima porque no solo están desplegando medios para contener esa migración que viene a Ceuta, sino que también están admitiendo a las personas que deben ser devueltas a su país de origen, dijo la delegada.
Rachid Sbihi, del sindicato AUGC de la Guardia Civil en Ceuta, reconoce que Marruecos está aceptando la devolución de sus ciudadanos nacionales, pero recalca que no admite la devolución de inmigrantes que no tienen nacionalidad marroquí, como pueden ser argelinos o centroafricanos, quienes no pueden ser devueltos a sus países de origen y se quedan en España.
Reclaman refuerzo de plantillas y mejores condiciones laborales
Rachid Sbihi también señala que en los últimos días Marruecos ha reforzado la presencia policial en la playa más cercana a Ceuta, desde donde partían los inmigrantes que han cruzado a nado la frontera esta semana, pero incide en que Rabat lo ha hecho por una cuestión de seguridad porque ya se habían agrupado allí miles de personas.
La situación es dramática en Ceuta y se ha acentuado con el fenómeno de los 'nadadores', que en esta época del año aprovechan la densa niebla que suele haber en el mar para intentar bordear los espigones y llegar a territorio español. Necesitamos más guardias civiles. La Comandancia de Ceuta necesita un refuerzo de unos 200 agentes destinados a las unidades que llevan todo el peso de costas y fronteras, urge el portavoz de AUGC en Ceuta.
Los sindicatos policiales también reclaman mejoras en las condiciones laborales y de seguridad de los agentes, como la dotación de equipos de protección individual (EPI) más efectivos y la colaboración con los equipos médicos que atienden a los inmigrantes.
Los únicos medios sanitarios que tenemos para protegernos son guantes de látex y mascarillas, dice Eduardo García.
La Policía Nacional, encargada del traslado y custodia de los inmigrantes en los CATE, también pide mejoras en las medidas de protección en estos centros de acogida temporal, como la dotación de más equipos de protección individual (EPI) para los agentes que están en contacto directo con los inmigrantes.
Javier Otero, portavoz del sindicato JUPOL, hace hincapié en la masificación de los CATE canarios y en la falta de efectivos policiales, lo que hace que los agentes no puedan contener situaciones de disturbio o motín en estos centros.
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