La megaciudad 'The Line' enfrenta nuevos desafíos después de la cancelación de un componente crítico para el proyecto

La megaciudad 'The Line' enfrenta nuevos desafíos después de la cancelación de un componente crítico para el proyecto

La ambiciosa iniciativa saudí para construir la megaciudad The Line, un proyecto que aspira a convertirse en un ejemplo de sostenibilidad y eficiencia energética, se enfrenta a un nuevo obstáculo. La cancelación de un componente crítico para el proyecto ha generado inquietud entre los inversores y los responsables del desarrollo. La ciudad del futuro, que pretende albergar a más de 1 millón de personas y ser un modelo de ciudad inteligente, debe ahora buscar nuevas soluciones para superar este revés. La noticia ha generado un gran impacto en el sector inmobiliario y energético, y se espera que los responsables del proyecto anuncien pronto una nueva estrategia para superar este obstáculo.

La megaciudad 'The Line' enfrenta nuevos desafíos después de la cancelación de un componente crítico para el proyecto

La construcción de 'The Line', la megaciudad más ambiciosa de Arabia Saudí, sufre un nuevo golpe con la cancelación de una infraestructura crucial para el proyecto.

Neom, la primera fase de la megaciudad, estaba prevista para ser terminada en 2030. Sin embargo, a mediados de abril, se anunció que el proyecto sufrió un recorte de presupuesto debido a que los inversores rebajaron determinadas previsiones.

Entre los cambios, se redujo la población prevista de 1,5 millones de personas a unas 300.000, y la longitud del proyecto, que pasó de 170 kilómetros a 2,4 kilómetros.

Además, se ha cancelado la planta desalinizadora que prometía abastecer el 30% de las necesidades de agua previstas de la ciudad. Esta infraestructura iba a funcionar con energía renovable y utilizaría una avanzada tecnología de membranas para producir flujos de salmuera separados.

La planta desalinizadora estaba prevista para instalarse en Oxagon, una ciudad industrial flotante que se está construyendo al noroeste de Arabia Saudí y que, según los promotores del proyecto, será el primer puerto automatizado y centro logístico integrado del mundo.

Fuentes familiarizadas con la megaconstrucción informaron al diario MEED que el acuerdo de desarrollo conjunto para crear una planta de descarga de líquidos en Neom ha expirado y no ha sido renovado, lo que ha llevado a la cancelación del proyecto.

Señalaron que las necesidades de agua de Neom han evolucionado durante el último año. Esto conlleva a adoptar un enfoque gradual para ampliar la capacidad. Como resultado, hemos decidido descontinuar nuestro acuerdo de desarrollo conjunto para este proyecto.

La cancelación de la planta desalinizadora se suma a los retrasos que ya enfrentaba el proyecto The Line. Según el diario The Wall Street Journal, el proyecto se pagará con el Fondo de Inversión Pública, un fondo dirigido por el príncipe heredero. Además, asegura que el efectivo de este fondo se redujo en tres cuartas partes hace tres meses, hasta unos 15.000 millones de dólares.

La construcción de The Line sigue adelante, pero con nuevos desafíos y ajustes en su planificación original.