La National Gallery de Londres prohíbe la entrada de líquidos para prevenir un posible ataque a sus obras de arte
En un movimiento preventivo sin precedentes, la reconocida National Gallery de Londres ha decidido prohibir la entrada de líquidos en sus instalaciones para garantizar la seguridad de sus valiosas obras de arte. La medida, implementada con el fin de prevenir posibles ataques contra las piezas expuestas, busca proteger la rica colección de la galería, que incluye obras maestras de artistas como Vincent van Gogh, Leonardo da Vinci y Johannes Vermeer, entre otros.
La National Gallery prohíbe líquidos para prevenir ataques a obras de arte
La National Gallery, la mayor pinacoteca del Reino Unido, ha decidido prohibir la entrada de líquidos en sus instalaciones, excepto leche infantil y medicamentos con receta, como medida de seguridad para proteger sus obras de arte.
La medida entrará en vigor a partir de las 9 de la mañana de este viernes y se demorarán más de lo habitual los controles de seguridad. La institución ha tomado esta decisión tras cinco ataques a pinturas emblemáticas en los últimos meses.
Ataques a obras de arte
Desde julio de 2022, la National Gallery ha sido víctima de ataques a obras maestras como Los girasoles de Vincent van Gogh, El carro de heno de John Constable y La Venus del espejo de Velázquez. Estos actos, perpetrados por activistas medioambientales, han causado daños físicos a las obras, angustia a los visitantes y al personal, y han alterado la misión del museo de garantizar que el arte sea accesible para el disfrute de todos.
En algunos casos, los activistas arrojaron sopa de tomate como parte de su protesta, lo que ha llevado a la institución a tomar medidas drásticas para proteger su colección de pinturas.
Seguridad en primer lugar
La National Gallery ha declarado que la medida es necesaria para asegurar la seguridad de todos y de la colección de pinturas de la nación. La institución fundada en 1824 está comprometida con la protección de sus obras de arte y la seguridad de sus visitantes y personal.
Con esta medida, la National Gallery busca prevenir futuros ataques y garantizar que sus obras de arte sigan siendo accesibles para el disfrute de todos.
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