La operación secreta detrás del nombramiento de Perelló: cómo se fraguó la negociación que relegó a otros siete candidatos a segundo plano

La operación secreta detrás del nombramiento de Perelló: cómo se fraguó la negociación que relegó a otros siete candidatos a segundo plano

En un giro inesperado, la designación de Perelló como nuevo titular ha generado un gran interés en el ámbito político. Sin embargo, lo que muchos no saben es que detrás de este nombramiento se esconde una operación secreta que involucró a varios actores clave. En este artículo, descubriremos los entretelones de la negociación que llevó a Perelló al puesto y relegó a otros siete candidatos a un segundo plano. ¿Qué estrategias se utilizaron para lograr este resultado? ¿Cuáles fueron los intereses en juego? A continuación, te presentamos la historia detrás de este nombramiento polémico.

La operación secreta detrás del nombramiento de Perelló: cómo se fraguó la negociación que relegó a otros siete candidatos a segundo plano

Después de que el Gobierno y el PP desbloquearan el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tras más de cinco años en funciones, sucedió algo que más que peculiar era inédito. Los 20 vocales del Consejo se dispusieron a nombrar a su presidente -que lo sería también del Tribunal Supremo-, sin injerencias políticas. Hasta este momento, los acuerdos para renovar el CGPJ siempre incluyeron una propuesta para el presidente, pero esta vez los vocales han escogido con libertad.

El nombramiento ha sido celebrado por varias asociaciones judiciales, por PSOE y PP, y por ambos sectores del CGPJ. Los progresistas consideran una victoria que la elegida sea una mujer, que además está afiliada a la asociación Juezas y Jueces para la Democracia. Los conservadores, que pusieron su nombre sobre la mesa, están satisfechos con el nombramiento de una candidata independiente y neutral que no está teledirigida por Moncloa.

La negociación complicada

El 30 de julio, un flamante CGPJ se reunía en su primer Pleno con la única tarea de nombrar un presidente. Los 20 vocales acordaron partir de una base de siete candidatos. El bloque progresista presentó a Ángeles Huet, Ana María Ferrer y Pilar Teso. Los conservadores propusieron a Esperanza Córdoba, Antonio del Moral, Carmen Lamela y Pablo Lucas.

El problema es que no cumplía con los tres requisitos del ala progresista: era imprescindible que fuera una mujer, magistrada del Tribunal Supremo y progresista. Según explican fuentes de este sector a 20minutos, la exigencia de poner a una mujer al frente del CGPJ y el Supremo viene avalada por razones históricas y por la necesidad de representar un cambio en el Poder Judicial.

El 30 de julio, cuando salieron de aquel Pleno, los vocales solo se habían puesto de acuerdo en reanudarlo al día siguiente. La conversación del 31 no dio frutos y la tercera, que se produjo el 5 de agosto, tampoco dio lugar a un pacto. El sector progresista tenía clara su apuesta por la magistrada Pilar Teso, la misma que acordaron el ministro Félix Bolaños y el popular Esteban González-Pons en una de sus negociaciones frustradas para renovar el Consejo.

Precisamente por esto último, los conservadores consideraban a Teso la candidata del Gobierno, y rechazaron de lleno su candidatura. Si sus compañeros querían una mujer, que nombraran a Carmen Lamela. El 19 de agosto, los vocales se reunieron de nuevo para tramitar algunos asuntos urgentes y decidieron convocar otro Pleno para tratar de nombrar presidente el 2 de septiembre.

Un cambio de planes

Las miradas estaban puestas en el día 6 de septiembre -este jueves-, cuando se celebrará la apertura del año judicial. Durante los cinco años de bloqueo, el Tribunal Supremo y el CGPJ han estado representados en el acto por un presidente en funciones, Carlos Lesmes, y después por uno interino, Francisco Marín Castán. Los nuevos vocales del Consejo se propusieron evitar que la escena se repitiera este jueves, así que el Pleno del 2 de septiembre sería decisivo.

Hasta la llegada del lunes, una comisión negociadora de ocho vocales ha tratado de alcanzar un pacto sin éxito. Y el lunes por la mañana esta comisión se volvió a reunir antes de la celebración del Pleno. Nadie parecía dispuesto a ceder, de forma que el ala conservadora propuso un cambio de planes: ampliar la lista de candidatos para encontrar un perfil de consenso.

Perelló tenía todas las papeletas para ser aupada por el Consejo, aunque se enfrentaría con la candidata Ana María Ferrer en una votación que se produjo este martes. Finalmente obtuvo el apoyo de 16 de los 20 vocales. El consenso es uno de los elementos clave de la noticia, un punto de partida para lo que viene, destaca una de las fuentes.

En el CGPJ admiten que les ha tomado tiempo llegar a un acuerdo, pero aseguran que la negociación ha sido fluida y cordial. Llegar a acuerdos es parte de nuestro trabajo, señala otra fuente del Consejo.

Desde el sector conservador, se muestran contentos de haber escogido una candidata neutral e independiente y retratan a Perelló como una defensora a ultranza de la independencia del Tribunal Supremo.

Una vez atajada la elección de presidenta, queda que esta jure su cargo ante el rey el miércoles a primera hora y después tome posesión del mismo en el Supremo. Así, todos dan por sentado que estará preparada para pronunciar este jueves el discurso inaugural del año judicial, un texto que el gabinete del CGPJ lleva semanas preparando y al que Perelló tendrá que dar su impronta personal.

La primera mujer en presidir el Supremo y el CGPJ

Isabel Perelló se convierte en la primera mujer en presidir el Supremo y el CGPJ, rompiendo el techo de cristal en el Poder Judicial. Su nombramiento ha sido celebrado por todos los sectores políticos y judiciales, y se espera que su presidencia marque un cambio en la historia del Poder Judicial.