Los ladrones de casas se van con el beneplácito: una moneda, el felpudo levantado y gran astucia

Los ladrones de casas se van con el beneplácito: una moneda, el felpudo levantado y gran astucia

En un impactante caso de delincuencia, una banda de ladrones de casas ha demostrado una extraordinaria habilidad para llevar a cabo sus fechorías sin dejar rastro. Su modus operandi es simple pero efectivo: dejan una moneda en el lugar del crimen y, en algunos casos, incluso levantan el felpudo para evitar sospechas. La gran astucia de estos delincuentes ha permitido que se esfumen con facilidad, llevándose consigo objetos de valor y dejando a las víctimas con la sensación de inseguridad y impotencia.

Ladrones de casas: ahora no necesitan forzar la cerradura, solo una moneda o el felpudo levantado

Lejos quedaron los tiempos en que los ladrones de casas reventaban puertas y ventanas a golpe de mazo. Ahora les basta marcar la vivienda con una moneda o levantar el felpudo para después tirar de maña, manipular la cerradura y entrar.

Robos en verano: los ladrones se aprovechan de las vacaciones y dejan sus huellas

Principalmente, porque muchos españoles se van de vacaciones y dejan sus casas vacías. Los que no, pasan más tiempo en la piscina, visitando a familiares o tomando un refresco en una terraza. Para los amigos de lo ajeno eso significa más objetivos disponibles y más tiempo para actuar.

Lo primero es comprobar que una casa está deshabitada, y para eso la gama de métodos es tan amplia como la imaginación humana, explica el inspector jefe del Grupo XI de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Policía Nacional de Madrid.

La astucia de los ladrones: cómo se roban casas en Madrid y otras ciudades españolas

Asaltan una casa y la propietaria huye solo con su perro, dejando atrás a sus hijos. Para comprobar si una casa está deshabitada, los ladrones utilizan métodos como llamar al telefonillo, acercar la oreja a la puerta o marcar las viviendas.

Entre los métodos nuevos se encuentra dejar monedas en el suelo o levantar los felpudos. En muchas ocasiones, el personal de limpieza deja los felpudos levantados para poder barrer y fregar con más facilidad, por lo que no levantan sospechas entre los vecinos.

Si pasan unos días y la marca sigue en el lugar, los ladrones saben que el objetivo es bueno y pasan a lo que el inspector jefe llama técnicas de habilidad, con las que no necesitan siquiera forzar la cerradura.

Entre estas técnicas se encuentran las llaves falsas, que se pueden aprender viendo vídeos en internet y que se utilizan ya en buena parte de los robos. En Madrid, se lo encuentran en el 90% de casos.

El 'bumping', golpear una llave maestra hasta que salten los pistones de la puerta y se abra, o el 'impresioning', que consiste en introducir una lámina de metal en la cerradura para conseguir un molde con la que copiar la llave original, son algunos de los métodos utilizados por los ladrones.

La profusión de estos delitos durante los veranos madrileños contrasta con la situación que se vive en los pueblos españoles y las zonas rurales, donde la gente regresa a sus pueblos durante las vacaciones veraniegas y las casas que en otras épocas del año están deshabitadas se llenan de vida.

Para prevenir este tipo de delitos, hay consejos para todos los gustos y bolsillos, que van desde las alarmas, cámaras y cerraduras más sofisticadas hasta la tradicional luz encendida para que parezca que la casa está habitada.

Pero hay otros más sencillos, como pedir a un vecino de confianza que esté atento a cualquier movimiento sospechoso durante nuestra ausencia, y alguno que sirve para todo el año: echar la llave antes de salir.

La recomendación de la Policía Nacional y la Guardia Civil siempre es guardar el postureo para la vuelta de las vacaciones y así evitar dar pistas a los ladrones sobre nuestro paradero.

Es difícil que le ocurra a una persona de a pie, pero no está de más resistir a la tentación de subir una foto de tu día en la playa. Puede ser que tengas el típico vecino pirata que aproveche y te robe, advierte el inspector jefe.