El representante del sector agrario valenciano, Mazón, ha llevado a cabo una importante gestión en Bruselas al defender con determinación las peticiones y reclamos del campo valenciano. En un encuentro crucial, Mazón ha expuesto con claridad y contundencia las necesidades y desafíos a los que se enfrenta el sector, destacando la importancia de recibir un apoyo y respaldo adecuado por parte de las autoridades europeas. Esta defensa en el corazón de la Unión Europea resalta la relevancia que tiene para la economía y la sociedad valenciana el sector agrícola, así como la urgencia de implementar medidas que garanticen su viabilidad y sostenibilidad. Esta iniciativa de Mazón representa un paso significativo en la defensa de los intereses del campo valenciano a nivel internacional.
Carlos Mazón defiende en Bruselas las peticiones del campo valenciano ante la UE
El sector agrario valenciano ha expuesto este miércoles sus demandas ante las instituciones europeas para acabar con la crisis de rentabilidad que impide a los agricultores vivir de sus cultivos. Las principales organizaciones han acudido a Bruselas acompañadas por el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, que ha intervenido en una conferencia en el Europarlamento sobre los desafíos y soluciones para el sector primario.
El Gobierno valenciano ha dado su pleno apoyo a un documento de posición consensuado que ha sido presentado en este acto. En este documento, expuesto por el director de Cooperatives Agro-alimentàries, Enrique Bellés, se incide en que tras las grandes cifras macroeconómicas, se esconde una profunda crisis estructural, provocada, entre otros aspectos, por una serie de decisiones políticas adoptadas por las instituciones comunitarias.
Asimismo, denuncia que el escenario actual provoca que a los agricultores y ganaderos no les salgan las cuentas, mientras parece que en la UE no se tiene una percepción real de que hay un problema.
El documento también aborda una batería de propuestas realizadas por el sector productor valenciano, entre las que se incluyen la adaptación de los objetivos medioambientales del Pacto Verde a su realidad económica y social; la eliminación de burocracia y la simplificación de la PAC o mayor firmeza en la toma de decisiones tras la detección de envíos procedentes de terceros países contaminados con plagas de cuarentena.
Reclamaciones justas. Mazón criticó que el desequilibrio entre el discurso medioambiental y la realidad de los agricultores ha sido excesivo y advirtió a la Comisión de que no vale con querer limpiar nuestra conciencia con un discurso medioambiental imposible de cumplir.
El president, que se reunió con la presidenta del Parlamento, Roberta Metsola, y con miembros del gabinete del vicepresidente de la Comisión, Valdis Dombrovskis, reclamó que la UE deje de ser contradictoria con la agricultura y, en referencia a las protestas, señaló que no es solo que sus reivindicaciones sean justas sino que también son desesperadas.
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