En una sorprendente revelación, se ha descubierto que Mohamed Ali, considerado uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos, no participó en los Juegos Olímpicos de Roma 1960, a pesar de lo que muchos creían. La razón detrás de esta ausencia es que, en ese momento, Ali era un boxeador amateur y no se especializó en la categoría de peso gallo, en la que se celebraron los combates en esos Juegos. Esta información desmiente la creencia popular de que Mohamed Ali ganó una medalla de oro en aquellos Juegos. A continuación, exploraremos más a fondo esta noticia y descubriremos qué sucedió realmente en aquel momento.
La Roma que no fue: ¿Por qué Mohamed Ali no participó en los Juegos Olímpicos de 1960?
El Coliseo Romano, escenario de un espectáculo de luces
En 2010, Roma celebró el 50 aniversario de los Juegos Olímpicos de 1960 con un espectáculo de luces en el Coliseo Romano. Después de una larga espera y numerosas solicitudes, la ciudad de Roma tuvo finalmente el honor de albergar los Juegos Olímpicos de 1960. La capital italiana se esmeró en la celebración de este gran evento deportivo, presentando algunas de las mejores instalaciones vistas hasta entonces en la historia olímpica.
La ciudad italiana contó con el beneplácito y la bendición del Papa, lo que les otorgó un significado especial. España envió a Roma una delegación de 143 atletas, que compitieron en 16 disciplinas deportivas diferentes. Esta fue la representación más numerosa que el país había enviado hasta ese momento a unos Juegos Olímpicos.
La historia detrás de la ausencia de Mohamed Ali en los Juegos Olímpicos de Roma
Entre las grandes figuras que brillaron en Roma 1960 se encuentra Wilma Rudolph, apodada la gacela negra. Esta atleta estadounidense se convirtió en la primera mujer norteamericana en ganar tres medallas de oro en atletismo en unos mismos Juegos. Por su parte, la gimnasta soviética Larissa Latynina volvió a destacar, sumando otras seis medallas a su impresionante palmarés, repitiendo así su hazaña de Melbourne 1956.
Una de las figuras más destacadas de los Juegos Olímpicos de Roma 1960 fue Mohamed Ali, quien debutó en el torneo de boxeo y se alzó con la medalla de oro en la categoría de pesos ligeros. Sin embargo, poco después de su triunfo, Ali protagonizó un gesto que pasaría a la historia: arrojó su medalla a un río como protesta por la discriminación racial que sufría la población afroamericana en Estados Unidos en aquella época.
La polémica en la piscina
La carrera de los 100 metros libres de natación generó una gran polémica en Roma 1960. De hecho, fue la última vez que se celebró esta prueba sin el uso de placas sensoras para marcar los tiempos de llegada. La mitad de los jueces vieron como vencedor al nadador estadounidense Lance Larson, mientras que la otra mitad se decantó por el australiano John Devitt.
A pesar de las imágenes de televisión y una fotografía que parecían dar la razón a Larson, el juez principal decidió otorgar la victoria a Devitt, llegando incluso a modificar los tiempos registrados por los cronómetros manuales. Esta controvertida decisión generó un gran revuelo en el mundo de la natación.
El legado de Roma 1960
Los Juegos Olímpicos de Roma 1960 dejaron un importante legado en la historia del olimpismo. La ciudad italiana demostró su capacidad para organizar un evento de gran magnitud, sentando las bases para futuras ediciones. Además, el apoyo del Vaticano y la presencia del Papa otorgaron a estos Juegos un carácter especial y único.
Desde el punto de vista deportivo, Roma 1960 fue testigo de grandes hazañas, como los tres oros de Wilma Rudolph en atletismo o las seis medallas de Larissa Latynina en gimnasia. También fue el escenario del debut olímpico de Mohamed Ali, quien además de ganar el oro en boxeo, protagonizó un gesto reivindicativo contra el racismo que trascendió lo meramente deportivo.
En definitiva, los Juegos Olímpicos de Roma 1960 escribieron una página memorable en la historia del deporte, con momentos de gloria, polémicas y reivindicaciones sociales que han quedado para siempre en el recuerdo de los aficionados al olimpismo.
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