Noticia: La lealtad de los caníbales, obra de Diego Trelles Paz, publicada por Anagrama en 2024, llega a su cuarta parte

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Noticia: La lealtad de los caníbales, obra de Diego Trelles Paz, publicada por Anagrama en 2024, llega a su cuarta parte

La espera ha terminado para los aficionados a la literatura peruana. La obra maestra de Diego Trelles Paz, La lealtad de los caníbales, ha alcanzado un nuevo hito con la publicación de su cuarta parte. La editorial Anagrama ha dado a conocer esta nueva entrega en el año 2024, generando gran expectación entre los lectores que han seguido con interés la trama de esta serie. La lealtad de los caníbales ha sido aclamada por la crítica y el público por su narrativa innovadora y su capacidad para reflejar la realidad social de Perú. ¿Qué nos deparará esta nueva entrega? No podemos esperar para sumergirnos de nuevo en el mundo creado por Trelles Paz.

La lealtad de los caníbales: un triángulo de violencia y amor

La cuarta parte de La lealtad de los caníbales de Diego Trelles Paz: un descenso a la oscuridad

Llegamos a la tercera parte de La lealtad de los caníbales de Diego Trelles Paz, editado por Anagrama. Ahora es 'el triángulo': el comando de policía, Manyoma y Arroyo, la dureza del escuadrón (que aún con esos muertos tan tibios no soportarían el escándalo). Manyoma y Arroyo, violentos como el sexo, como la muerte y la confusión, Alina y Alipio Ponce, se llena la boca de las letras, de los cuerpos, sexo duro, sexo de saliva.

La violencia es tan extrema que se confunde con el placer y, si tus códigos lo permiten, con el amor más podrido que puedes encontrar en el colmado del tiempo.

Un viaje a la violencia y la desesperación

Un viaje a la violencia y la desesperación

¿Dónde mierda estamos, Diego? No me preguntes, Octavio. Nadie te invitó, ahora no me pidas ayuda para salir. Esto no es una novela de Cabrera Infante, esto no es el boom, ni el bam, ni pólvora doliente, esto es un trío nuevo, entre Perfumo, Alfredo y Alipio Ponce. ¿Pero Alipio no estaba muerto? Hay tantos muertos en esta historia, Octavio, en realidad los protagonistas son fantasmas, no hay nadie vivo. Pero, por favor, no se lo digas.

Llegará la resaca del dolor, la realidad de la muerte, no es una película, es sexo, es ahora, es espera, es agua, más agua, hasta que solo quede mar.

Rosalba espera a Sofía y Rosalba, en realidad, no sabe qué carne desea, en realidad Rosalba no quiera placer, quiere amor. O viceversa. Un mail. Mira lo que hace la cerda de tu hija. En la quinta parte habrá un cierre. Helmut, Berlín y Heidegger será el enésimo triángulo, y la canción Demon Days, y el europeo central y serio frente al tercer mundo, la miss juvenil embarazada, el frío de la huida, los niños que no lloran suelen estar muertos. ¿Esas cosas de monstruos son posible en Alemania? ¿Vive o no vive? Deja de preguntar, Octavio.

En la sexta parte, en el salón blanco, en el corte y confección, solo dura tres meses. Es blanca y es Higuita, como René. Así que se conforma el triángulo con tres peluqueras acomodadas a la joda, los trapicheos, los robos, entre Nemesio y Chucky acabas explotando por los aires.

Chau, Melody (Nelson), desaparece, acaba en un departamento en Magdalena del Mar, poco más que un cuartillo para perderse, huir de las bandas, de los crueles de la palma, un boleto, comprar en la estación ropa, el bus Lima-Medellí. Despertar con una glock en la boca, antes de la violencia otra violencia, la vida como violencia, la literatura como mirilla hacia la violencia, hacia los cuerpos prestados, el intercambio, la adrenalina es mucho más fuerte que la merca. Taxi, estación, ropa, bus, Lima-Medellín. (GONORREA de PAÍS)

En el siete llegamos a Miley Cyrus (Hanna Montana según la canción de Nick Cave) llevando a su terreno Jolene de Dolly Parton. Rosalba salta al padre, al padrecito, canción para Pablo, ¿Dónde está Sofía? ¿Vos te crees que todo es una telenovela? Pura Telenovela, en la parroquia de San Marcelo la belleza de Lima confluye en su fachada de estilo rococó o churrigueresco.

Llamo a mi mujer. Ella conoce la canción de Cave y Montana y es una experta en historia del arte. No está, no me contesta, sigo escribiendo. El Padre Pablo, con sus gafas de Top Gun, la historia sobre Top Gun, la narrativa homosexual que existe en esa película según Tarantino.

Me encanta cuando Diego Trelles Paz pone al padre Pablo a despotricar como un macarra del sur de Madrid y uno vuelve a la realidad, se acabó el acento neutro, se acabó la literatura latinoamericana, volvemos de Lima a Madrid, a la oscuridad europea, tan oscura como la del Perú, tan insertada en las venas que acaba pareciendo sangre. Flipando con todo el morro que le echa.

El final

Estamos numerando el final. Estamos en el 8. Ya llegamos a la cacería, no existen personas ni criminales en la web, solo Haydeé y la Chata. Diez años. No, no por favor, no nos fotografíen. Me llamo Carla Suárez. Yo Octavio Gómez. En la 9 está la Avenida Colmena, está Ishiguro sin sangre en las manos, espumarajos del pasado para encontrarse en el penúltimo (o último, quién sabe) triángulo de la novela, construido sobre senos y saliva en lo más profundo del bar: Ishiguro, Rosalva y Sofía.

Mira, estamos acabando y no podemos dejar cabos sueltos, sea Contreras, sea el comandante Arroyo, sea la salsa o Juan Gabriel. Píper Pimienta tiene munición sin gastar, el camino de Contreras y Arroyo es hacia la muerte, el asesinato, la desaparición.

Imagina participar en un concurso de imitadores, recibir varios tiros y que nadie pueda sacarte el traje con el que te has caracterizado. Desaparecerías tú: yo soy EL CANTANTE, te lo digo, como la adicción en los dientes de Héctor Lavoe, como los planes perfectos, como los disparos al aire. (YO SOY) el concurso, los hombres que explotan, los traidores en el piso, ¿Cuánto valdrá cada uno? Una canción, una más, en esta mixtape desquiciada, en este avispero de desesperación, True colors de Cyndi Lauper. Amor y violencia, comandante y Manyoma, la selva, ya te dije que no podían quedar cabos sueltos.

En el silencio después del disparo se escucha cómo se cierra el círculo. Perfumo, Alipio, es el 11, el final.

Un epílogo. Un ascensor. Un hábito negro. Un padre, otro padre, bajo la niebla imposible de Lima, siguiendo a Miguel de Unamuno, buscando el personaje a su autor, Diego, sé que todavía guardas algo bajo la manga, qué claro, qué cielo: todo parece el sueño de un fantasma, el cielo de Limás es tan lúgubre que producía tristeza. Arroyo (que ha sobrevivido o sueña con sobrevivir, quizá sea un fantasma dispuesto hacia el tránsito, infierno y Lima se confunden) y su compañera. Sabes que van duros, que el alcohol les enciende.

No hay más que atestado de atentados, intercesión, arreglo, solo preso, amigo.

José Manuel Pérez

Soy José Manuel, un experto en temas de actualidad nacional española y colaborador del Diario Online, un periódico independiente que se caracteriza por ofrecer información veraz y objetiva. Mi pasión por el periodismo me impulsa a investigar a fondo cada noticia para brindar a nuestros lectores contenido relevante y de calidad. Con mi experiencia y conocimientos, me esfuerzo por contribuir al debate público y mantener informada a nuestra audiencia sobre los acontecimientos más importantes en España. ¡Sígueme para estar al tanto de toda la actualidad!

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