¿Por qué debes lavar tus sábanas de cama con más frecuencia de lo que piensas? Descubre los beneficios para tu salud y higiene personal

¿Por qué debes lavar tus sábanas de cama con más frecuencia de lo que piensas? Descubre los beneficios para tu salud y higiene personal

La higiene personal es fundamental para nuestra salud y bienestar. Uno de los aspectos más importantes, aunque a menudo pasado por alto, es la limpieza de nuestras sábanas de cama. La mayoría de las personas las lava con una frecuencia moderada, pero ¿es realmente suficiente? La respuesta es no. Lavar tus sábanas con más frecuencia puede tener un impacto significativo en tu salud y bienestar. En este artículo, descubriremos los beneficios que conlleva esta práctica y por qué debes incorporarla en tu rutina de limpieza.

La verdad sobre las sábanas sucias: ¿cuántas bacterias y hongos viven en tu cama?

Las sábanas albergan millones de bacterias, hongos, ácaros y virus que se acumulan con el paso de los días. El ser humano pasa 25 años de su vida durmiendo, de ahí la importancia de mantener una buena higiene de las sábanas en las que se duerme.

Con el paso de los días, la ropa de cama acumula bacterias, hongos, ácaros o virus que se alimentan gracias al calor, el sudor, la saliva o las células cutáneas muertas de quienes descansan en ella. En las últimas décadas, diversas investigaciones han analizado diferentes tipos de sábanas, desde las que se utilizan los hospitales a las que se encuentran en casa, y todas señalan que la ropa de cama sucia representa un riesgo real de infecciones para las personas.

El peligro que esconder en tu cama: ¿por qué debes lavar tus sábanas con más frecuencia de lo que piensas?

La BBC enumera en un artículo algunos de estos estudios, como el llevado a cabo en el año 2013 por el Instituto Pasteur de Lille (Francia). Los investigadores analizaron las sábanas de pacientes hospitalizados y descubrieron que las que estaban sucias contenían bacterias estafilococos, presente de manera común en la piel humana.

Aunque estas bacterias suelen ser inofensivas, pueden causar enfermedades graves si entran en el cuerpo a través de heridas abiertas, algo muy habitual en los hospitales, avisa Manal Mohammed, microbióloga de la Universidad de Westminster (Reino Unido).

En esa clase de entornos, la ropa de cama sucia representa un riesgo real de infección muy alto, de ahí que en los hospitales de países desarrollados existan procedimientos muy rigurosos para limitar la transmisión de posibles enfermedades. Lavan la ropa de cama a temperaturas muy altas, lo que mata la mayoría de las bacterias, apunta el profesor David Denning, experto en enfermedades infecciosas y salud global en la Universidad de Manchester (Reino Unido).

¿Qué ocurre en las sábanas y almohadas de casa?

Un estudio dirigido en 2013 por la empresa estadounidense de camas Amerisleep determinó, tras tomar muestras de una funda de almohada que no se había lavado en una semana, que contenía alrededor de tres millones de bacterias por cada 6 cm cuadrados, lo que supone unas 17.000 veces más que el asiento de un inodoro medio.

David Denning, por su parte, condujo una investigación similar en 2006 en almohadas de amigos y familiares, donde encontraron hongos. En términos de números, estamos hablando de miles de millones o billones de partículas de hongos en cada almohada, indica.

El motivo por el que hay tantos hongos se debe al sudor. La mayoría de nosotros sudamos de noche por la cabeza. También todos tenemos ácaros del polvo en nuestras camas, y el excremento de los ácaros proporciona alimento para que el hongo viva. Y luego, por supuesto, la almohada se calienta todas las noches porque tu cabeza está apoyada en ella. Así que tienes humedad, tienes alimento y tienes calor, expone Denning.

Debido a la proximidad de la almohada a la boca, la presencia de hongos en esta zona tiene consecuencias serias para personas con enfermedades respiratorias, como asma o sinusitis. También deben tener mucho cuidado los pacientes inmunodeprimidos: Si tienes leucemia, te han trasplantado un órgano o tienes la mala suerte de acabar en cuidados intensivos por Covid o gripe, contraes lo que se llama aspergilosis invasiva, que es cuando el hongo entra en los pulmones y sigue creciendo y destruye el tejido pulmonar, advierte este profesor.

La solución, en estos casos concretos, sería comprar una almohada nueva cada tres o seis meses.

La frecuencia de lavado de las sábanas

Respecto a la frecuencia con la que se deben lavar las sábanas, la mayoría de los expertos recomiendan hacerlo semanalmente. Además del lavado, planchar las sábanas también ayuda a reducir el número de bacterias.

Sin embargo, puede que esta frecuencia no sea suficiente en algunos casos. Dormir con una mascota también contribuye a aumentar la cantidad de bacterias y hongos en la cama, al igual que no ducharse antes de acostarse, irse a dormir con calcetines sucios o hacerlo con maquillaje. A ello hay que añadir que algunas personas comen en cama, por lo que en estas situaciones, lavar las sábanas con mucha regularidad es importante, y creo que una vez a la semana puede no ser suficiente, concluye Denning.