El Ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha presentado una propuesta controvertida que busca transferir el 83% de las paradas de autobús a las comunidades autónomas. Según el Gobierno central, esta medida busca mejorar la eficiencia en la gestión de los servicios de transporte público. Sin embargo, críticos y opositores han manifestado su desacuerdo, argumentando que esta medida conllevará un recorte en las rutas y un deterioro en la calidad del servicio. La polémica propuesta ha generado un intenso debate en torno a la gestión del transporte público en España.
El Ministerio de Transportes propone transferir a las comunidades autónomas el 83% de las paradas de autobús interurbano
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha propuesto a las comunidades autónomas que se hagan cargo de las rutas propias del 83% de las paradas de autobús interurbano, que forman parte de líneas que solo discurren por sus respectivos territorios y tienen muy poca demanda.
Según datos de Transportes de 2022, se trata de 3.832 paradas de las 4.405 existentes. Esta transferencia de responsabilidad es uno de los elementos que Puente ha planteado a los gobiernos autonómicos para actualizar el mapa concesional de líneas de autobús.
El objetivo es reducir tarifas y tiempos de viaje
El Ministerio defiende que con esta reorganización del mapa concesional, seguirán bajo su competencia las rutas más largas, con más demanda y que unan distintas comunidades, lo que se conseguirá reducir las tarifas una media del 20% y los tiempos de viaje, en un 30%.
El Ministerio considera que el 83% de las paradas que existen en la actualidad deberían ser gestionadas por las comunidades autónomas, porque son recorridos que no salen de sus territorios y que, en muchos casos, apenas tienen demanda. Según el Ministerio, casi un tercio de estas paradas no tienen ningún pasajero que viaje entre dos comunidades y el 77% solo tienen uno o menos al día.
Las comunidades autónomas rechazan asumir las rutas deficitarias
Las autonomías rechazan asumir solas las rutas deficitarias de autobús mientras Puente ultima un nuevo mapa de concesiones. El Ministerio ofrece transferirles 25 millones en subvenciones directas a las que las comunidades podrán sumar otros 15 millones de ingresos por estos servicios.
El consejero de Infraestructuras, Transporte y Vivienda de Extremadura, Manuel Martín Castizo, calificó la propuestas de Puente de atropello y reclamó que convoque la Conferencia Sectorial de Transporte para negociar con todas las comunidades a la vez en lugar de celebrar reuniones bilaterales.
Extremadura considera un desatino y rechaza de plano una propuesta que afectaría de forma total o parcial a 164 municipios de esta comunidad, donde viven más de 800.000 ciudadanos, el 75% de la población.
El Ministerio busca que el nuevo mapa de líneas de autocar esté formado por líneas de larga distancia, que unan grandes núcleos de población y de las que queden suprimidas muchas paradas en las que apenas se suben o bajan pasajeros.
Según el Ministerio, de esta forma, por ejemplo, un recorrido Guadalajara-Soria se acortaría en una hora y dos minutos; un Ciudad Real-Valencia, una hora y 33 minutos; o un Salamanca-Cádiz, una hora y 22 minutos.
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