Tal día como hoy se llevó a cabo la ejecución del último condenado por brujería en los juicios de Salem: el poder de la histeria colectiva (Note: La

Index

Tal día como hoy se llevó a cabo la ejecución del último condenado por brujería en los juicios de Salem: el poder de la histeria colectiva

Hoy, hace más de tres siglos, se llevó a cabo un evento que marcó la historia de los Estados Unidos de América. El último condenado por brujería en los infames juicios de Salem fue ejecutado, poniendo fin a una serie de procesos judiciales que se caracterizaron por la histeria colectiva y la persecución masiva de personas acusadas de practicar la brujería. Este trágico episodio nos permite reflexionar sobre el poder de la histeria colectiva y cómo puede llevar a la sociedad a cometer errores irreparables. En este artículo, exploraremos los eventos que rodearon los juicios de Salem y cómo su legado sigue siendo relevante en la actualidad.

La muerte lenta de Giles Corey: un capítulo oscurísimo en la historia de la histeria colectiva

El 19 de septiembre de 1692, Giles Corey murió aplastado y con la cabeza bien alta. Fue el último hombre condenado a muerte por brujería en Salem, Massachusetts, EEUU.

La histeria colectiva que llevó a la muerte

La histeria colectiva que llevó a la muerte

Corey era un granjero que caía regular en el pueblo. Conocido por ser un tanto violento, se enfrentaba a menudo a los vecinos y años atrás había matado a un hombre por robarle unas manzanas. Se casó tres veces y su última mujer, Martha Corey, fue arrestada bajo sospecha de conjuros.

La acusadora era Mercy Lewis, una vecina que aseguraba haber visto el espectro de Corey pidiéndole firmar el libro del diablo. A ella se sumaron decenas de testigos que confirmaban su relación con lo oculto.

La técnica de la prensa: una muerte lenta y cruel

Corey se negó a formar parte del juicio. No quiso declarase ni culpable ni inocente. Sabía que una confesión implicaría la pérdida de sus tierras. Sus bienes serían embargados y sus hijos perderían todos los derechos.

Así que decidió revelarse. Calló. Y cayó. Los jueces lo llevaron hasta el extremo con la técnica de la prensa, una muerte lenta a base de grandes piedras apiladas sobre el tórax.

Las últimas palabras de Giles Corey

Aun así, Corey se negó a declarar. En lugar de sucumbir al desvarío, sus últimas palabras pidieron más peso. Este episodio fue incluido en la obra de teatro El Crisol de Arthur Miller, que utilizó la palabra peso hasta en diez ocasiones a lo largo de los cuatro actos.

La caza de brujas de Salem

En enero de 1692, dos niñas comenzaron a convulsionar en la ciudad de Salem. Betty Parris, de nueve años, y Abigail Williams, de 11, fueron diagnosticadas de embrujo. Pronto otras jóvenes empezaron a mostrar síntomas parecidos. Gritaban, se retorcían, parecían poseídas.

Las niñas acusaron a tres mujeres del pueblo de brujas y culpables de sus síntomas. Los desvaríos de unas crías y la presión social fueron pruebas suficientes para dar comienzo a la caza.

La histeria colectiva: una enfermedad psicógena masiva

La evidencia espectral bastaba para abrir expedientes, saldar cuentas, odios y venganzas. Acusaciones infundadas basadas en pesadillas, alucinaciones e imaginaciones marcaron una etapa negra en la historia jurídica universal.

Este fenómeno se conoce como histeria colectiva o enfermedad psicógena masiva, en la que los individuos se despersonalizan hasta asumir una especie de alma colectiva.

La sugestión colectiva abarca desde abducciones alienígenas, teorías conspirativas, fake news y crisis morales. Suele ocurrir en contextos de miedo o sensación de amenaza, se propaga con mayor facilidad si se publicita, y lo complicado es identificarla.

La histeria colectiva es un reto para la sociedad, ya que quienes la sufren creen realmente lo que dicen experimentar. Ciertos síntomas físicos, de hecho, aparecen en la realidad. La causa, sin embargo, no tiene razón ambiental. Es una creación de la mente.

Este episodio oscurísimo en la historia de la histeria colectiva nos recuerda que la verdad, en muchos casos, se ha convertido en un ente difuso y que la lucha de un individuo por la verdad, muchas veces, entra en conflicto con la sociedad.

Laura Ramírez

Hola, soy Laura, periodista de la página web Diario Online, un periódico independiente de actualidad nacional española. Mi pasión por la verdad y la objetividad me impulsa a investigar a fondo cada noticia que presento, brindando a nuestros lectores información veraz y relevante. Con una pluma ágil y comprometida, busco transmitir los hechos con claridad y rigor, contribuyendo a la formación de una sociedad informada y crítica. En Diario Online, trabajamos con el firme propósito de ser un referente en el periodismo digital, manteniendo siempre nuestra independencia y profesionalismo. ¡Gracias por seguirnos!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir