Tasa de exposición pasiva al vapeo es insignificante en comparación con el riesgo del tabaquismo pasivo, según nuevos estudios

Tasa de exposición pasiva al vapeo es insignificante en comparación con el riesgo del tabaquismo pasivo, según nuevos estudios

Una nueva investigación liderada por expertos en salud pública ha revelado que la tasa de exposición pasiva al vapeo es significativamente menor en comparación con el riesgo del tabaquismo pasivo. Según los resultados, la exposición accidental a vapores de cigarrillos electrónicos no supone un riesgo significativo para la salud, a diferencia del daño demostrado que causa el tabaquismo pasivo. Estos hallazgos pueden tener un impacto importante en la formulación de políticas públicas relacionadas con la regulación del vapeo y el tabaquismo. A continuación, se presentará un análisis detallado de los resultados y las implicaciones de este estudio innovador.

Nuevos estudios desmienten alarmas sobre el vapeo pasivo: la exposición es insignificante en comparación con el tabaquismo pasivo

Un nuevo estudio dirigido por investigadores del University College de Londres (UCL) en Reino Unido ha revelado que la exposición pasiva al vapeo es significativamente menor que al tabaquismo pasivo. Los resultados del estudio, publicado en 'JAMA Network Open', muestran que los niños expuestos al vapeo en espacios cerrados absorben menos de una séptima parte de la cantidad de nicotina que los niños expuestos al tabaco en espacios cerrados.

El estudio analizó análisis de sangre y datos de encuestas de 1.777 niños de entre tres y 11 años en Estados Unidos para llegar a estos resultados. Los investigadores encontraron que la absorción de nicotina en niños expuestos al vapeo en interiores era un 84% menor que en niños expuestos al tabaquismo en interiores, mientras que los niños expuestos a ninguno de los dos absorbían un 97% menos.

El vapeo es mucho menos peligroso que el tabaquismo pasivo, según investigación británica

Los expertos y asociaciones reivindican la evidencia científica del vapeo como solución frente al tabaquismo. Según el doctor Harry Tattan-Birch, autor principal del estudio, nuestro estudio muestra, utilizando datos del mundo real en lugar de un entorno de laboratorio artificial, que la absorción de nicotina es mucho menor en el vapor de segunda mano que en el tabaquismo pasivo.

El profesor Lion Shahab, también autor principal del estudio, añade que este artículo sugiere que las preocupaciones sobre el vapeo pasivo pueden ser algo exageradas, y que la exposición pasiva a sustancias tóxicas probablemente sea muy baja.

La exposición pasiva al vapeo es significativamente menor que al tabaquismo pasivo, según nuevo estudio del University College de Londres

El estudio utilizó datos de una muestra representativa a nivel nacional de niños en los EE. UU., recopilados entre 2017 y 2020 como parte de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES) anual de EE.UU. Se utilizaron análisis de sangre que detectaron la concentración de cotinina para evaluar la cantidad de nicotina que habían absorbido los niños.

Los investigadores se centraron en los datos de los niños, ya que, a diferencia de los adultos, era poco probable que los niños hubieran vapeado o fumado, lo que significa que la mayor absorción de cotinina era resultado únicamente del vapor o humo de segunda mano.

Los resultados del estudio tienen implicaciones importantes para determinar si se debería permitir vapear en espacios cerrados, proporcionando más evidencia de que el impacto del vapeo en la salud de los transeúntes será mucho menor que el de fumar.

Sin embargo, los investigadores apuntan que hay otros factores a tener en cuenta al evaluar si los espacios interiores deberían estar libres de vaporizadores. En particular, si el vapeo se produce habitualmente en espacios interiores, esto puede normalizar el comportamiento, animando a las personas a empezar a vapear y haciendo que les resulte más difícil dejarlo.

Investigaciones anteriores del mismo equipo mostraron que los adultos en Inglaterra eran mucho más propensos a vapear que a fumar en espacios cerrados: nueve de cada diez vapeadores lo hacían en espacios cerrados, mientras que solo la mitad de los fumadores lo hacían en espacios cerrados.

La nicotina en sí misma presenta un riesgo limitado, pero muestra cuál podría ser el nivel máximo de exposición posible a partir del vapeo pasivo.

La exposición a sustancias nocivas distintas de la nicotina presentes en el vapor probablemente será sustancialmente menor.

Los resultados confirman los riesgos de fumar en espacios cerrados en presencia de niños, algo que debería evitarse a toda costa.

Es mejor evitar también el vapeo en espacios cerrados en presencia de niños.