- Tesoros subterráneos en Ávila: Descubre las emporiones piscinas naturales ocultas bajo un puente histórico del siglo XVI
- Descubre los tesoros subterráneos de Ávila: piscinas naturales ocultas bajo un puente histórico
- Un chapuzón en el interior: piscinas naturales de Navaluenga, el refugio perfecto para el verano
- Patrimonio histórico en el pueblo de Navaluenga
- Las refrescantes piscinas naturales de Navaluenga
Tesoros subterráneos en Ávila: Descubre las emporiones piscinas naturales ocultas bajo un puente histórico del siglo XVI
En el corazón de la ciudad de Ávila, oculta bajo un puente histórico del siglo XVI, se esconde un tesoro subterráneo que hasta ahora ha permanecido desconocido para la mayoría de los visitantes. Un equipo de investigadores ha descubierto una serie de emporiones piscinas naturales que se encuentran bajo la estructura del puente, convirtiéndose en un hallazgo histórico y turístico de gran importancia. Estas piscinas naturales, que datan de la época medieval, ofrecen una visión única de la historia y la arquitectura de la ciudad, y constituyen un atractivo turístico más para visitar Ávila.
Descubre los tesoros subterráneos de Ávila: piscinas naturales ocultas bajo un puente histórico
Cuando el calor aprieta en los meses de verano, a la mayoría se le viene la cabeza un chapuzón en una de las preciosas playas que se extienden por el litoral de España. Pero no hace falta estar en la costa para darse un refrescante baño, y es que en el interior del país también encontraremos verdaderos oasis en forma de piscinas y pozas naturales.
Por ejemplo, en la provincia de Ávila se encuentran las piscinas naturales de Navaluenga, perfectas para pasar un día veraniego. No solo cuenta con servicios como bares y baños para hacer la jornada más cómoda, sino que el paisaje es espectacular, combinando la frondosa naturaleza con un puente del siglo XVI que cruza por encima del agua.
El pueblo de Ávila con casas tradicionales de piedra, una calzada romana y rodeado de frondosos pinares, es el escenario perfecto para disfrutar de un día de verano en familia. Las piscinas naturales de Navaluenga son un verdadero oasis en el interior de España, rodeadas de verdes praderas y algunas de las casitas del pueblo.
Las piscinas naturales de Navaluenga se encuentran en el río Alberche, un afluente del Tajo, que serpentea por Castilla y León, Madrid y Castilla-La Mancha. A su paso por Navaluenga deja unas espectaculares piscinas naturales rodeadas de verdes praderas y algunas de las casitas del pueblo.
Las tierras donde hoy en día se encuentra el pueblo de Navaluenga ya estuvieron habitadas desde la época prerromana. A lo largo de los siglos, las diferentes civilizaciones que vivieron en la zona fueron dejando sus huellas, como la necrópolis visigoda del Cerrillo de San Marcos, del siglo VII.
Sin embargo, la primera mención a la villa no se da hasta el año 1172. Es a partir de entonces cuando se construyen algunos monumentos y edificios del pueblo que a día de hoy siguen formando parte de su patrimonio histórico y arquitectónico. Algunos ejemplos son la iglesia de Nuestra Señora de los Villares, levantada entre los siglos XIII y XIV, y el puente del siglo XVI que cruza sobre las aguas de las piscinas naturales de Navaluenga.
El puente fue construido con las aportaciones realizadas por los pueblos que formaron el Concejo de Burgohondo, para facilitar el paso de ganado a la sierra, explican desde el ayuntamiento de la localidad. La estructura imita el estilo románico y está hecha con sillares de granito unidos con argamasa. Además, cuenta con dos grandes tajamares, es decir, la pieza colocada en la base del puente para cortar el agua y repartirla con igualdad.
Las piscinas naturales de Navaluenga son el lugar perfecto para pasar un tranquilo día en familia, incluso con niños pequeños, ya que las piscinas cuentan con varias profundidades. El espacio está totalmente acondicionado para el baño, ya que dispone de baños, duchas, merenderos y zonas césped donde podremos refugiarnos del sol bajo la sombra de los árboles. Incluso, encontraremos bares y chiringuitos.
Para llegar a Navaluenga, el trayecto en coche desde la ciudad de Ávila es de aproximadamente 40 minutos por la N-403. Desde Madrid, asciende a 1 hora y 40 minutos por la M-501.
¡Apúntate a la newsletter y recibe en tu correo las mejores propuestas para viajar por España y por el mundo!
Deja una respuesta