En un partido que se perfilaba como una oportunidad para el Real Madrid para recuperar terreno en la lucha por el título de Liga, lo que se vivió en el estadio de Son Moix fue una crisis total. La derrota ante el Mallorca por 1-0 no solo supone un nuevo tropiezo para los madridistas, sino que también pone de manifiesto el descontento que reina en el vestuario. La patada impuesta por la roja a Ferland Mendy en el minuto 24 del partido es solo la punta del iceberg de una situación que se ha ido cociendo en las últimas semanas. La falta de ideas y la falta de respuesta del equipo ante la adversidad son solo algunos de los síntomas de un equipo que parece no encontrar la salida a su crisis.
La ira de Mendy: Patada impuesta con roja directa en el último minuto
El Real Madrid acabó desesperado en Son Moix este domingo tras empatar ante el Mallorca en un partido en el que se quedó sin soluciones. La frustración de los blancos era total y quedó reflejada con la peor acción del duelo: la durísima patada de Mendy sancionada con roja directa en el último minuto del partido.
La acción llegó en el 96', en el último minuto del tiempo de añadido, cuando Ferland Mendy trató de cortar una contra con una patada sin demasiado sentido. Con los tacos, en la zona alta de la pierna. una entrada a destiempo que pudo hacer mucho daño a Muriqi.
El francés pidió disculpas al goleador del Mallorca, pero ello no parece que vaya a rebajar una dura sanción que será comunicada en los próximos días.
Un Madrid muy gris empata y decepciona en su estreno liguero en Mallorca
Más allá del feo gesto que enturbió un partido físico pero respetuoso, la patada demostró la inoperancia de un Real Madrid que fue tan incapaz de mantener la renta obtenida con el gol inicial de Rodrygo como de buscar soluciones ante la buena defensa del Mallorca.
Parecía que la llegada de Mbappé convertía a los blancos en favoritísimos, aunque este domingo quedó demostrado por Arrasate que hay maneras de 'sacar de quicio' a la superplantilla merengue.
La frustración en el Bernabéu es total después de este partido, donde el Real Madrid se desolva sin soluciones ante el Mallorca. La peor cara del Real Madrid se vio reflejada en la acción de Mendy, que salió expulsado del partido.
El partido también demostró que el Real Madrid sigue buscando su identidad en el campo, y que la falta de creatividad y de ideas en el ataque es un problema que sigue sin resolverse.
A pesar de la decepción, el Real Madrid debe seguir adelante y buscar soluciones para su próximo partido. La expulsión de Mendy es un golpe duro para el equipo, pero no puede ser una excusa para no seguir luchando por los objetivos.
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