En un sorprendente giro de los eventos, la policía logró detener a un individuo que se había vuelto notorio en las redes sociales después de publicar un mensaje provocador en el que se jactaba de haber eludido la justicia. El hombre, cuya identidad no ha sido revelada, utilizó la famosa frase Que me busquen para desafiar a las autoridades, mostrando una impunidad que finalmente le costó cara. La detención se produjo después de que las fuerzas del orden recibieran una denuncia anónima que los llevó hasta el paradero del individuo. Ahora, el hombre enfrenta cargos penales y se enfrenta a una posible condena.
La Policía Nacional ha detenido en Valencia a un hombre de 28 años que tenía en vigor cinco reclamaciones judiciales, dos de ellas para ingresar en prisión. El arresto se produjo este martes minutos después de que se jactase en un vídeo en directo en una red social de que esa misma tarde debía presentarse en un centro penitenciario y no iba a acudir, mientras afirmaba que la Policía debería buscarlo, ya que para eso les pagan, que trabajen.
Los hechos ocurrieron el martes por la tarde en el barrio de la Fuensanta cuando agentes policiales, que prestaban servicio de prevención de la seguridad ciudadana, acudieron al lugar donde el sospechoso de cinco búsquedas por juzgados de Valencia y Castellón se encontraba emitiendo en directo un vídeo en una red social, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
El hombre se encontraba sentado en un banco de la vía pública, donde estaba realizando emisiones en directo en una red social desde las cuatro de la tarde. Una usuaria le preguntó si iba a ingresar en prisión, a lo que él respondió: No creo y con este calor, menos, y añadía: Que me busquen, que para eso pagan a la Policía; que trabajen y que busquen.
Asimismo, también se jactaba del consumo de drogas. El sospechoso, al ver a los agentes aproximarse al lugar, intentó huir hacia uno de los portales, haciendo caso omiso a las indicaciones de los efectivos, que le conminaban a detenerse.
Finalmente, los policías lograron interceptarlo, si bien el hombre supuestamente ofreció gran resistencia y lesionó a una de las agentes. En el momento de la detención comenzaron a aproximarse decenas de personas residentes en la zona, que increparon a los policías y pretendían entorpecer la detención.
El hombre fue arrestado por constarle cinco reclamaciones judiciales para su detención, dos de ellas para ingresar en prisión por robo con violencia y conducción temeraria y el resto por
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