Una jugadora de ajedrez descalificada por vida por intentar asesinar a su oponente con veneno
En un escándalo que conmociona al mundo del ajedrez, una jugadora de élite ha sido descalificada por vida después de que se descubriera que intentó asesinar a su oponente en un torneo internacional. La jugadora, cuyo nombre no ha sido divulgado, había preparado un veneno para administrárselo a su rival durante el partido. Afortunadamente, el plan fue descubierto a tiempo y la víctima no sufrió daños. La Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) tomó la decisión de descalificar a la jugadora de por vida, considerando que su acción era inaceptable y peligrosa. Este incidente ha generado un gran impacto en la comunidad ajedrecística, que condena este tipo de comportamientos y defiende la ética y el fair play en el deporte.
Jugadora de ajedrez rusa descalificada por intentar asesinar a rival con mercurio
Una jugadora de ajedrez rusa de 40 años, Amina Abakarova, ha sido acusada de intentar envenenar a su rival en un torneo celebrado en Makhachkala, Rusia. La mujer fue pillada por las cámaras de seguridad esparciendo una sustancia extraña sobre el tablero y las fichas de su contrincante, Umayganat Osmanova.
El plan fallido: Abakarova no dudó en esparcir lo que posteriormente se identificó como mercurio sobre el asiento de su rival antes de comenzar la partida. Sin llamar la atención y de manera casual, la mujer envenenó su lado de la mesa para luego irse como si no hubiera pasado nada.
El plan podría haber sido perfecto de no ser por un fallo a la hora de medir los tiempos de efecto. Y es que en apenas media hora, Osmanova comenzó a sufrir los primeros síntomas del envenenamiento, entre los que destacaron náuseas y mareos. La mujer, de 30 años, necesitó asistencia médica y se paró el combate.
Los síntomas del envenenamiento: En los primeros minutos, sentí falta de aire y un sabor a hierro en la boca. Tuve que pasar unas cinco horas en este tablero. No sé qué me habría pasado si no lo hubiera visto antes, ha explicado Osmanova a Russia Today.
La confesión: Amina acabó confesando su delito, asegurando que utilizó un viejo termómetro para dejarla fuera del torneo porque sentía hostilidad hacia ella. Sin embargo, como así ha querido dejar claro, ella no quería matar a su rival, solo asustarla.
Las consecuencias: Por el momento, todavía se encuentra a espera de un juicio. La mujer se enfrenta no solo a la inhabilitación de por vida en cualquier competición, sino que también peligra su trabajo como entrenadora de ajedrez infantil.
Es importante destacar que ambas jugadoras se conocían desde la infancia y se habían enfrentado en varias ocasiones, lo que hace que este incidente sea aún más sorprendente y condenable.
Este incidente ha generado conmoción en el mundo del ajedrez y ha llevado a cuestionar la ética y la moralidad de algunos jugadores que estarían dispuestos a cualquier cosa para ganar, incluso a costa de la vida de sus rivales.
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