Vicky y Manu protagonizan un emocionante 'Rosco' de 'Pasapalabra' con un final inesperado
En un emocionante episodio de Pasapalabra, los concursantes Vicky y Manu se enfrentaron en un Rosco que dejará con la boca abierta a los espectadores. La tensión fue palpable desde el principio, cuando ambos concursantes se lanzaron a responder a las preguntas con rapidez y precisión. Sin embargo, nadie esperaba el sorprendente giro que tomó el juego en su recta final. ¿Qué sucedió en ese final inesperado? ¿Quién salió victorioso? ¡Descúbrelo en esta emocionante entrega de Pasapalabra!
Vicky y Manu, en 'Pasapalabra'
Tras el empate en el programa del pasado lunes, Vicky y Manu afrontaron el programa del día con mucha más relajación, ya que no tenían que disputar La Silla Azul. El bote había superado los 200.000 euros (208.000) y era el objetivo de ambos concursantes.
Manu fue el primero en enfrentarse a las preguntas de Roberto Leal con los 147 segundos acumulados en el programa del día. Tras contestar dos letras, le cedió el turno a su rival. Vicky, por su parte, contó con 137 segundos para responder las 25 letras de El Rosco, y utilizó 16 segundos para enlazar una racha de cinco aciertos consecutivos antes de pasar palabra.
En el intercambio de turnos, la burgalesa cometió su primer error en la H, dejándola sin opciones de bote. Ambos fueron avanzando en sus respectivos roscos hasta que llegó el fallo de Manu en la P.
Con un fallo cada uno, sin opciones de llevarse los 208.000 euros del bote, continuaron jugando en busca de la victoria del día. Fue Vicky la primera en llegar a la Z con 17 aciertos, 28 segundos y un fallo.
La igualdad continuó siendo la tónica del duelo entre ambos participantes, porque Manu acabó la primera vuelta con 17 aciertos, 38 segundos y un fallo. La burgalesa tomó la delantera, llegando a los segundos finales con 21 aciertos, por los 19 del madrileño, que consiguió remontar y adelantar a su adversaria, plantándose en 22 aciertos.
Vicky vio como le quedaban 13 segundos y estaba a una letra de empatar y a dos de vencer. Acertó la I y prefirió no arriesgar, firmando un inesperado empate y librando a ambos de tener que disputar La Silla Azul en el próximo programa.
El concurso se caracterizó por la igualdad y la tensión, ya que ambos concursantes lucharon hasta el final por llevarse el bote. Al final, el empate les permitió librarse de La Silla Azul y seguir luchando por el premio.
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