En un momento histórico para la cultura y la historia de España, se hace público que el Palacio de El Pardo, emblemática residencia real situada en el corazón de la capital madrileña, abre sus puertas para mostrar al mundo su rico patrimonio y legado. Esta imponente construcción, que ha sido testigo de importantes eventos y encuentros entre líderes mundiales, cuenta con una trayectoria única y llena de glamour, habiendo sido propiedad de la monarquía española durante siglos. Uno de los episodios más destacados de su historia es la estancia de la reina Victoria, que se hospedó en el palacio durante su visita a España. En las próximas líneas, descubriremos más sobre la rica historia de este icónico lugar.
El Palacio de Aiate, un reflejo del buen gusto del siglo XIX
San Sebastián es una de las ciudades más fascinantes de toda España. Su impresionante oferta cultural, como su prestigioso festival de cine, sumado a su majestuoso entorno natural y su extraordinario patrimonio arquitectónico hacen de la 'Bella Easo' uno de esos destinos que hay que visitar al menos una vez en la vida, aunque sea durante un fin de semana.
La ciudad del País Vasco no solo es la playa de la Concha, los tres montes que la custodian y su exquisita gastronomía, sino que en San Sebastián hay maravillosos edificios que son paradas imprescindibles en el itinerario. Uno de ellos es el espectacular Palacio de Aiate, situado en el barrio del mismo nombre y que fue residencia real durante varios años.
Un palacio con historia
Situado en el parque de Aiate, este fascinante palacio data del año 1878, cuando fue mandado construir por los duques de Bailén en un lugar de paso del Camino de Santiago. En la página web oficial de turismo de Euskadi se le define como un reflejo del buen gusto de finales del siglo XIX, algo a lo que contribuyó su arquitecto, el francés Adolfo Ombrecht.
Un cambio de uso
Tras la construcción del vecino Palacio de Miramar, el de Aiate dejó de ser residencia real, aunque no por ello cayó en desuso: de hecho, lo utilizó durante toda la dictadura como residencia de verano, e incluso partió desde él para encontrarse en Hendaya con Adolf Hitler, como se detalla en la web.
Arquitectura y jardines
De inspiración neoclásica, el Palacio de Aiate cuenta con un edificio principal de dos plantas rectangulares, así como varias dependencias. La gran mayoría de las estancias están totalmente restauradas, aunque las maravillas del edificio no solo se encuentran intramuros: la magnífica mansión está rodeada de un jardín de 74.000 metros cuadrados que no hacen más que añadir espectacularidad a esta joya donostiarra.
Un nuevo propósito
Desde el año 2010, el Palacio de Aiate alberga la Casa de la Paz y los Derechos Humanos, un uso radicalmente diferente para el que estaba destinado originalmente. Si vas a hacer una escapada a San Sebastián antes de que acabe el año, no dudes en acercarte a este regio edificio, ya que es el perfecto ejemplo de la belleza del patrimonio de la ciudad.
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