El presidente del Gobierno Vasco, Iñigo Urkullu, ha hecho un llamado a la afición para que no pite el himno nacional durante la final de la Copa del Rey como muestra de respeto institucional. Esta petición surge en un momento de gran expectación y rivalidad deportiva, donde es fundamental mantener el fair play y la civismo entre los seguidores de ambos equipos. Urkullu, en su comunicado oficial, destaca la importancia de mostrar una actitud tolerante y respetuosa hacia los símbolos nacionales, independientemente de las diferencias políticas o ideológicas existentes. Es necesario recordar que el deporte, además de ser una competición, también es una oportunidad para fomentar los valores de unidad y convivencia entre todos los ciudadanos.
Urkullu insta al respeto institucional y a no pitar el himno en la final de la Copa del Rey
El Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha solicitado que en el encuentro de este sábado por la final de la Copa del Rey no se silbe el himno de España en aras del respeto institucional, subrayando que dicho respeto no debe ocultar los sentimientos de pertenencia.
Urkullu, junto a varios consejeros del Gobierno vasco, visitó la Fan Zone del Athletic en la Isla de la Cartuja, en Sevilla, con motivo del enfrentamiento entre el Athletic y el RCD Mallorca. En el lugar estuvieron presentes autoridades como la diputada general de Vizcaya, Elixabete Etxanobe, y el alcalde de Bilbao, Juan María Aburto.
El Lehendakari destacó la importancia de la movilización de la sociedad vasca en apoyo a los equipos de la región y expresó su deseo de que prime el respeto, la deportividad y la celebración del mejor equipo, deseando que sea el Athletic.
En relación al comunicado del Athletic que pedía no abuchear el himno español, Urkullu enfatizó que es un gesto de respeto institucional, independientemente del himno que se interprete, solicitando el mismo trato para el himno vasco durante los partidos de la Euskal Selekzioa.
El Lehendakari hizo hincapié en que los símbolos, como la ikurriña, el himno y el idioma, representan a toda la sociedad vasca y enfatizó la importancia de respetarlos en un marco de convivencia y reconocimiento mutuo.
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