En su última aparición en los Países Bajos, la reina Letizia ha captado la atención al ajustar su vestido para cumplir con el estricto protocolo real. La monarca española, reconocida por su elegancia y estilo, demuestra una vez más su habilidad para adaptarse a las normas de etiqueta en eventos oficiales. El gesto de modificar su indumentaria resalta la importancia de seguir las pautas establecidas en el ámbito de la realeza, donde cada detalle es significativo. La reina Letizia, siempre impecable en sus elecciones de moda, demuestra su compromiso con la imagen pública y el respeto por las tradiciones en cada una de sus presentaciones.
La reina Letizia destaca con su ajuste de vestido en su última aparición en los Países Bajos
En su segunda jornada en los Países Bajos, los reyes de España culminaron su viaje de Estado con un evento de despedida. Durante estos días, tanto Felipe VI como Letizia participaron en diversas actividades, entre las que destacan cenas de gala con detalles comentados, como la visibilización del neuroma de Morton, y eventos culturales como la organización LAB6 y un coloquio de cine español.
Para la despedida, los reyes de Holanda, Máxima y Guillermo Alejandro, acompañados de su hija Amalia, se unieron a sus Majestades en el Straat Museum de Ámsterdam para una recepción especial. Durante este encuentro, Felipe y Letizia expresaron su agradecimiento por la hospitalidad de la familia real neerlandesa, mientras se exhibían obras de diez muralistas españoles y holandeses.
Duelo de estilo entre Letizia y Máxima en la despedida real en Ámsterdam
En este evento de despedida, tanto la reina Letizia como Máxima de Holanda impresionaron con sus looks, protagonizando un duelo de estilo que mantuvo en vilo a los presentes. Máxima optó por un diseño verde y beige de Jantaminiau, una pieza que guarda en su armario desde hace al menos una década y que sigue siendo tendencia, destacando por su elegancia y originalidad.
Por su parte, Letizia eligió un vestido de la firma holandesa Benchellal, que fusiona la costura con la escultura en diseños monumentales y geométricos. La reina de España modificó sutilmente el diseño original para adaptarlo a la etiqueta del evento, convirtiéndolo en una pieza única y elegante que resaltaba su estilo refinado.
El vestido de Benchellal, en azul petróleo y con cortes escultóricos, fue transformado por Letizia en un diseño midi, adecuado para la ocasión, demostrando su habilidad para personalizar las prendas y destacar su elegancia. Este diseño, basado en una técnica de plegado que resalta la silueta femenina, fue complementado con accesorios sofisticados, como unos salones de Carolina Herrera y unos pendientes especiales regalados por el sultán de Omán a la reina Sofía en 1989.
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